Por Cambio16
24/05/2017
La Sala Segunda del Tribunal Supremo ha confirmado la condena de 21 meses de prisión y multa de 2.093.000 de euros impuesta al jugador del FC Barcelona Leo Messi como autor de tres delitos contra la Hacienda Pública cometidos en sus declaraciones del IRPF de 2007, 2008 y 2009.
Según ha informado el Poder Judicial en una nota, la pena se le impone por los 4,1 millones de euros que defraudó al fisco de los ingresos obtenidos por la explotación de sus derechos de imagen.
La sentencia rebaja de 21 a 15 meses de prisión la pena impuesta a su padre, como cooperador necesario, al apreciar la atenuante de reparación del daño por la devolución a Hacienda por parte de su hijo del dinero defraudado. Además, los magistrados cuestionan que hayan sido excluidos de la acusación en este caso los asesores fiscales del jugador barcelonista.
El texto hecho público este miércoles incluye dos votos particulares, de los magistrados Luciano Varela y Andrés Palomo, que creían que debió considerarse como continuado el delito fiscal. Un tercer magistrado de los cinco que han formado la Sala, Alberto Jorge Barreiro, firma un voto concurrente en relación a esa misma cuestión.
Cabe destacar que tal decisión no implica que Messi irá preso, pues en España los condenados a penas menores de dos años que no tienen antecedentes penales rara vez pasan tiempo tras las rejas.
Un ejemplo destacado es el caso de la cantante española Isabel Pantoja, condenada dos años por blanqueo de capitales en 2014, quien sí tuvo que ingresar en un centro penitenciario. Otra comparación más adecuada para Messi sea el caso de su compañero en el Barcelona y la selección argentina Javier Mascherano, condenado a un año de prisión luego de declararse culpable por defraudar unos US$2 millones.
El proceso contra la estrella del balompié inició en junio del pasado 2016, cuando la Audiencia de Barcelona acordó mantener imputado al futbolista del FC Barcelona Lionel Messi por presuntamente defraudar 4,1 millones de euros a Hacienda, irregularidad que asumió ante la juez instructora su padre y representante, Jorge Horacio. En ese entonces, la Fiscalía se querelló inicialmente por fraude fiscal contra Messi y su padre y representante, Jorge Horacio, pero meses más tarde pidió el archivo de la causa para el futbolista, después de que ambos pagaran al juzgado 5 millones de euros, que incluían la suma defraudada más los intereses.
El padre de Messi asumió ante la juez toda la responsabilidad en la gestión tributaria de su hijo, pero la instructora acordó mantener al futbolista imputado en la causa, en una decisión que después respaldó la Audiencia de Barcelona. Para el ministerio público, fue el padre del futbolista el que tuvo un “papel decisorio y decisivo” en la creación de una estructura societaria domiciliada en paraísos fiscales con la que presuntamente, entre los años 2007 y 2009, el deportista evitó tributar en España por los beneficios recaudados con sus derechos de imagen.