Los goles de Benzema (11’) y Marcelo (55’) permitieron al Real Madrid volver a la senda del triunfo ante el Viktoria Plzen en el Santiago Bernabéu. Los tres puntos son un respiro para el conjunto merengue, que no ganaba desde hace cinco encuentros, y especialmente para Lopetegui, que desde hace días convive con rumores de despido. De igual forma, consigue la punta del grupo G de La Lica de Campeones.
El partido comenzó con un cabezazo de Ramos a la madera tras un saque de esquina. El undécimo de la temporada y el quinto en Champions. El Madrid apostaba a una presión alta pero el Plzen también encontró espacios para llegar a Navas.
El costarricense tuvo que estirarse para evitar que Petrzela abriera el marcador después de ganarle la espalda a Lucas Vázquez. Sin embargo, casi inmediatamente después del susto, Benzema sí pudo poner el primero. Precisamente tras un centro del lateral.
Fue el gol número 57 del francés en Liga de Campeones, lo que le permite ponerse como cuarto goleador histórico de la competición. Un dato que redime al francés, a menudo cuestionado por su “falta” de goles.
Tiempos desesperados
El tanto pareció darle al Madrid el control del partido pero la ilusión se rompió con dos buenas ocasiones del Viktoria, ambas por la banda de Lucas. Primero, la tuvo Limbersky. Respondió Benzema con un tiro que detuvo Hruska e Isco falló una ocasión frente al arco, con opción de pase a Benzema y Kroos. Pudo haber un penalti de Limbersky a Lucas, pero el árbitro no lo vio.
Al final del primer tiempo, Hrosovsky pudo poner la igualdad en el marcador pero, inexplicablemente, falló el tiro a puerta vacía cuando ya había pasado a Keylor. El segundo tiempo, inició con la misma dinámica. Esta vez, Cermak desperdició una ocasión clarísima. Sin embargo, Lopetegui movió ficha y le dio entrada a Fede Valverde por Isco.
Fue bueno el cambio porque el Madrid marcó casi inmediatamente. Esta vez, fue Marcelo, quien se ha erigido como goleador en tiempos desesperados. Valverde se la dejó a Bale, y este jugó con el brasileño que definió de vaselina.
El gol de Viktoria llegó al 78, cuando Hrosvsky, sin encontrar resistencia de Ramos ni de Marcelo, disparó pegado al poste, imposible para Keylor. El tanto le dio vida a los visitantes y minimizó a los locales, que no se creen su leyenda. La lesión de Marcelo, al 90 por una entrada de Epkai, fue el punto y final para una noche de dudas.
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