Por Cambio16
20/04/2017
El Congreso de los Diputados conmemora este año el Día Internacional del Libro, que se celebra el 23 de abril, con la incorporación a su Biblioteca de una treintena de ediciones de «El Quijote» donadas por embajadas acreditadas en España, gracias a las que la segunda obra más traducida del mundo podrá leerse ya en la Cámara en 25 lenguas, en las que se incluyen las cooficiales del Estado.
La iniciativa, impulsada por la presidenta del Congreso, Ana Pastor, y la Comisión de Cultura, presidida por Marta Rivera, ha sido presentada este miércoles en un acto que se ha celebrado en el Salón de Pasos Perdidos, en el que ha intervenido el director de la Real Academia Española, Darío Villanueva.
Embajadas de 30 países, presentes en el acto, han respondido a la iniciativa de la Cámara con la donación de cuidadas y lujosas ediciones de «El Quijote«, y también con ejemplares de «bolsillo», que demuestran cómo la obra de Miguel de Cervantes es adquirida y leída por los ciudadanos de países de todo el mundo.
Alemania, Austria, Azerbaiyán, Brasil, Bulgaria, China, Colombia, Corea del Sur, Costa Rica, Cuba, Eslovenia, Estados Unidos, Irán, Israel, Finlandia, Francia, Holanda, Hungría, Italia, Japón, Kazajstán, México, Paraguay, Portugal, República Checa, Rumanía, Rusia, Serbia, Tailandia y Turquía son los países que han contribuido por el momento para que «El Quijote» sea universal también en el Congreso, con ediciones en más de 20 lenguas y en alfabetos como el cirílico, japonés, hebreo o farsi.
Pastor, durante su intervención en el acto, agradeció a los embajadores las «generosas» donaciones recibidas y destacó que los ejemplares que ahora enriquecen los fondos de la Biblioteca son «un homenaje a la capacidad de los distintos pueblos para congregarse en torno a las más altas manifestaciones del alma humana». «Cualquier lector del mundo puede hacer suya esta obra pues no encontrara diferencias entre su propia humanidad y el profundo e intemporal relato de Cervantes», ha recalcado la presidenta.
Tras ella, ha tomado la palabra el director de la Real Academia de la Lengua. Villanueva ha incidido en que «El Quijote» gira en torno a un eje central: el diálogo. «Las dos palabras más frecuentes» en la obra de Cervantes, resaltó, » son ‘dijo’ y ‘respondió'».
«No subestimemos el poder de la literatura. Es Don Quijote quien ha reunido en el Congreso de los Diputados a personas de 25 nacionalidades distintas para celebrar juntos los libros y la lectura», destacó, tras ellos, la presidenta de la Comisión de Cultura, Marta Rivera.
En este Día del Libro, que pone fin a la celebración del IV Centenario de Cervantes, el Congreso de los Diputados expondrá en el Salón de Pasos Perdidos algunos de los ejemplares más valiosos de las obras del autor que forman parte de los fondos de la Biblioteca.
La edición más antigua de «El Quijote» es un ejemplar de 1735, encuadernado en pergamino, que fue donado por el escritor y político Ángel Fernández de los Ríos. Un ejemplar de la primera edición en la que «Don Quixote» pasó a llamarse «Don Quijote», que data de 1819; una lujosa edición de Tomás Gorsch impresa en Barcelona en 1859 y con cuidadas ilustraciones; o el primer facsímil, reproducido en fotomecánica entre 1871 y 1879, son algunos de los ejemplares más valiosos. También, un ejemplar en esperanto (idioma inventado, sobre la base de lenguas románicas, germánicas y eslavas, con el fin de que sirviera como lengua universal) y una edición alemana antigua.
En las estanterías de la Biblioteca pueden encontrarse ediciones conmemorativas especiales realizadas con motivo de centenarios y aniversarios durante los siglos XIX y XX; las traducciones de la novela de Cervantes al catalán, el euskera, y el gallego; y una de las últimas adquisiciones de la Cámara, «El Quijote puesto en castellano actual» por Andrés Trapiello, con prólogo de Mario Vargas Llosa.