Multitudes de personas en Polonia protestan en contra de una sentencia que declara inconstitucional interrumpir un embarazo debido a defectos congénitos. lo que en implica la prohibición total delos abortos. Las manifestaciones comenzaron la semana pasada inmediatamente después de la decisión judicial y de que el presidente Andrzej Duda celebrara Polonia tuviera una de las leyes de aborto más restrictivas de Europa.
Luego de una semana de manifestaciones y alborotos en las calles, Duda se retractó diciendo que las mujeres deberían tener derecho a abortar en caso de defectos congénitos en el feto. Lo que aparentemente lo desliga de la cúpula conservadora del gobierno que impulsó la prohibición del aborto.
«No puede ser que la ley requiera esta clase de heroísmo a una mujer», dijo Duda.
Las mujeres y los jóvenes salieron a las calles a protestar, pero fueron atacadas por miembros del grupo de ultraderecha Juventud de toda Polonia Breslavia, Poznan y Bialystok. Antes Jaroslaw Kaczynski, presidente del partido de gobierno y el político más influyente, pidió que a sus afiliados a defender las iglesias. Unas mujeres habían interrumpido la misa del domingo para clamar por su derechos.
Anteriormente Polonia permitía la interrupción del embarazo en caso de anomalías fetales, amenazara la salud de la mujer, incestos o violaciones. La presidenta del tribunal, Julia Przylebska, sentenció que permitir los abortos por anomalías fetales legalizaba las “prácticas eugenésicas”. Agregó que como la Constitución de Polonia garantiza la protección de la vida humana, la terminación del embarazo basada en la salud del feto equivalía a “una forma de discriminación que estaba prohibida de manera directa”. Lo fallos en contra de violaciones de la Constitución no pueden apelarse.
Protestas con apoyos inéditos de mineros, agricultores y taxistas
En la práctica se demostró que de los 1.100 abortos realizados el año pasado, 1.074 por anomalías fetales. Pero en la realidad son muchos más los abortos de las mujeres polacas. Algunas viajan al extranjero para abortar o se los practican de manera ilegal, clandestina.
En plena pandemia las protestas han sido multitudinarias y diarias en toda la nación. Exigen que la corte revierta la decisión y la liberalización de la ley del aborto. Las protestas se han extendido de ciudades a pueblos y aldeas. Las mujeres han encontrado un apoyo inédito en gremios como los taxistas, agricultores y mineros del carbón, que tienen sus propias quejas contra el gobierno.
Las manifestaciones ponen en evidencia las profundas divisiones en un país que durante mucho tiempo fue un bastión del catolicismo conservador y ahora vive una rápida y profunda transformación social.
Los críticos dicen que el partido gobernante Ley y Justicia cumple las órdenes de los líderes de la Iglesia y los grupos de derecha. El partido, que asumió el poder en 2015, se presenta como el defensor de los valores católicos tradicionales y denigra a sus oponentes como apátridas antipolacos y anticristianos.
Al considerar a la mujeres polacas solo como esposas y madres, los grupos por la igualdad de derechos son catalogados como agentes peligrosos de la propaganda occidental liberal. Lo que obliga a las mujeres a elegir entre realizar peligrosos abortos ilegales, viajar al extranjero para abortar o tener hijos con problemas graves de salud.
Se rompió el antiguo tabú social de desafiar a la Iglesia
Como una medida de protesta, las mujeres polacas entraron a varios templos el domingo para interrumpir la misa. También enfrentaron a los curas con obscenidades, mostraron pancartas que decían “Esto es la guerra” o “No seremos victimizadas” y pintaron las paredes con spray.
El martes en la noche, Jaroslaw Kaczynski, las acusó de pretender destruir Polonia y pidió a los seguidores de su partido defender las iglesias “a cualquier precio”. Como respuesta, miembros de partidos de ultraderecha rodearon las iglesias «para protegerlas». En algunos casos hubo palabrerío con las manifestantes y la policía.
El miércoles el ministro del Interior, Mariusz Kaminski, prometió que la policía tomaría medidas para evitar hechos similares. Los cuerpos policiales ya habían detenido a 76 personas y la fiscalía había abierto 101 procedimientos.
El coronavirus se propaga rápidamente en Polonia
En el último mes, Polonia se ha convertido en uno de los países más afectados del mundo por el nuevo coronavirus. Incluso el presidente, Andrzej Duda, dio positivo el sábado. Los casos van en aumento y hospitales están cada vez más abrumados, lo que pone a prueba el sistema de salud.
Las autoridades polacas notificaron en el último reporte un total de 18.820 nuevos positivos de COVID-19, un nuevo máximo diario en la progresión acelerada tanto de contagios como de víctimas mortales, con 236 fallecidos en 24 horas.
El total de infecciones desde el inicio de la pandemia supera los 299.000 y el de muertos alcanza los 4.851. Las autoridades polacas declararon el viernes de la semana pasada el conjunto del territorio nacional como «zona roja» por el alto riesgo de contagios.
Actualmente Polonia es uno de los países europeos con una de las leyes sobre el aborto más restrictivas. En casi toda Europa se permiten los abortos hasta cierto punto del embarazo. En Estados Unidos también, a pesar de que en varios estados se dificulta el acceso a esa intervención médica. El fallo del tribunal superior aleja aún más a Polonia de las corrientes sociales dominantes en Occidente.
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