Por Cambio16
La dirección nacional del PP ve con buenos ojos el pacto propuesto por Esperanza Aguirre en Madrid para evitar gobiernos de Podemos y propone extenderlo a otros municipios, pero el resto de partidos no está por la labor, como demuestra el acuerdo que desbancará a los populares de uno de sus bastiones, Valladolid.
El PSOE y las candidaturas de Valladolid toma la palabra y Sí se puede han llegado a «un planteamiento general», liderado por los socialistas, para impedir que el alcalde vallisoletano en funciones, Javier León de la Riva, del PP, pueda renovar el cargo, según informa la agencia Efe.
Se trata de la confirmación del primer revés para los candidatos del PP que han ganado sin mayoría absoluta y que pueden ser víctimas de lo que la dirección nacional del partido considera «pactos de perdedores» entre los socialistas y «la extrema izquierda».
Por ello, desde la calle Génova se ha dado un respaldo explícito a la propuesta que hizo Aguirre al PSOE y a Ciudadanos de un pacto para impedir que Ahora Madrid gobierne la capital de España o a cualquier intento de formar gobierno por parte de un candidato del PP que haya ganado.
El caso es que, horas después de recibir el respaldo de su partido, la propia Aguirre ha dado un paso más allá y ha planteado la posibilidad de un «gobierno de concentración» en el que participe incluso Ahora Madrid, una idea que ha gustado más que la del martes a la candidata de Ciudadanos, Begoña Villacís.
Todo ello a la espera de que las direcciones del PSOE y de Podemos fijen estrategias comunes para afrontar el período de negociaciones. Los líderes de ambos partidos, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, han mantenido una nueva conversación sobre corrupción, regeneración democrática y medidas económicas, aunque sin entrar de momento en los pactos.
Ciudadanos mantiene su exigencia de primarias para dar su apoyo a algún partido, lo que dificulta su acercamiento al PP.
Por ello, preocupado por que el resto de grupos no tenga «altura de miras», el candidato del PP a la Presidencia de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, a quien le basta con el apoyo de Ciudadanos para gobernar, ha lanzado un aviso a navegantes: «No descartamos para nada que haya que convocar de nuevo elecciones».
Pactos
Juan Vicente Herrera, que el martes convulsionó a su partido al abrir la duda sobre si se presentará o no a la investidura, no ha despejado esa incógnita, pero se ha comprometido a liderar la búsqueda de pactos con otras fuerzas políticas para garantizar la estabilidad de los municipios y de las Cortes de Castilla y León.
Tampoco lo va a tener fácil el PSOE para hacerse con los gobiernos autonómicos en territorios donde no ha sido el más votado: no sólo el líder de Podemos en Aragón, Pablo Echenique, ha avisado de que él quiere ser presidente, sino que la candidata de Compromís, Mónica Oltra, ha mostrado ese mismo deseo en la Comunitat Valenciana.
La reacción del PSPV-PSOE ha sido anunciar que si no cuaja el pacto con Compromís y Podemos para que el socialista Ximo Puig presida el Govern, harán una oferta a Ciudadanos para conseguir una mayoría suficiente.
«Evitar que el PP gobierne»
Y Pablo Iglesias ha querido dejar claro que su partido no formará parte «en ningún caso en un gobierno presidido por un candidato del PSOE» y que tiene mucho más en común con partidos como Compromís o MÉS en Baleares, aunque el objetivo de la política de pactos de Podemos será «evitar que gobierne el PP».
Navarra
Uxue Barkos, candidata de Geroa Bai a la presidencia de Navarra, ha comenzado un arduo camino para tratar de forjar un acuerdo programático con otras cuatro fuerzas políticas (EH Bildu, Podemos, PSN e Izquierda-Ezquerra) para propiciar el cambio en Navarra.
En paralelo, EH Bildu ha iniciado con Izquierda-Ezkerra las negociaciones para tratar de hacerse con el Ayuntamiento de Pamplona.
Andalucía
No hay avances en Andalucía, donde los socialistas han anunciado que la presidenta en funciones, Susana Díaz, no se sentará a negociar con el resto de partidos hasta constatar que abandonan el «tacticismo».
Ada Colau avanza
Quien se mueve es Ada Colau, candidata de Barcelona en Comú a gobernar la Ciudad Condal, quien ha continuado con su ronda de reuniones para buscar apoyos, el miércoles con el socialista Jaume Collboni, y ha lanzado un mensaje a Artur Mas: que deje de comportarse como un miembro de CiU «apenado» por perder Barcelona y comience a actuar como presidente de la Generalitat.
En Cataluña no se habla sólo de pactos postelectorales, sino que se vislumbran también acuerdos previos a las elecciones autonómicas anunciadas para el 27S. En ese contexto, la monja Teresa Forcades se ha postulado para liderar una lista bajo el nombre de «Capgirem Catalunya en Comú» que agrupe a los partidos que forman Barcelona en Comú, a la CUP e incluso a ERC.