Por Iñigo Aduriz
13/03/2017
Era la primera vez que el PP madrileño hacía suya la premisa de ‘un afiliado, un voto’ y a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, no le pudo ir mejor. En la votación que tuvo lugar ayer domingo, la candidata obtuvo el 86,38% de los apoyos de los militantes populares de Madrid. Una victoria contundente frente a su rival, Luis Asúa, que le permitirá hacerse con la presidencia del PP de Madrid con una holgada mayoría en el Congreso regional que el partido celebrará el próximo fin de semana.
Su simbólica victoria como líder emergente del partido y la que encajó la pasada semana en Canarias, Asier Antona, inauguran el periodo congresual autonómico que los populares tienen previsto llevar a cabo a lo largo de este mes. Así, tras la celebración, el pasado mes de febrero, del 18 Congreso Nacional, en las próximas semanas tendrán lugar los distintos Congresos Autonómicos y regionales con los que el PP pretende consolidarse como partido de gobierno y, como explican desde la propia formación, perfilar «una propuesta para el futuro», con «unos valores e ideas» que hacen que se consideren «referencia para tantos españoles».
“No renunciamos a ser un partido español, a la unidad de España, al proyecto europeo, a la libertad personal, a la igualdad entre españoles, a ser una sociedad solidaria y, por supuesto, no renunciamos al imperio de la ley y a la firmeza en la lucha contra el terror. Son nuestros fundamentos y, de ninguna manera, vamos a prescindir de ellos”. Esa es la línea estratégica que se ha marcado el PP según resumió el propio Mariano Rajoy, y que implica una apuesta clara por los valores tradicionales de la derecha.
El proceso de «renovación interna», que así se ha denominado desde la formación conservadores si bien en la mayoría de los territorios el protagonista es el continuismo, tendrá el próximo fin de semana uno de sus momentos más importantes. Además del congreso del PP madrileño, el partido también celebra cónclaves en Canarias, Murcia, Andalucía, Asturias, Castilla-La Mancha y País Vasco.
La polémica estará servida en muchos de esos congresos. Así, por ejemplo, en Murcia el único candidato a presidir el partido en la región es el también presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez, imputado por corrupción y con su mandato institucional en cuestión por la retirada del apoyo de Ciudadanos. Podría darse así el caso de que Sánchez fuese reelegido como presidente del PP de Murcia apenas unos días antes de que la oposición le presentara una moción de censura para desbancarle de la jefatura del Ejecutivo regional.
En Castilla-La Mancha la única candidata a presidir el partido en la comunidad será la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal. Tras imponerse en las cinco provincias de la región, Cospedal se erige como única candidata de cara al Congreso del próximo día 18 de marzo en Cuenca, tras haber protagonizado otra polémica por cuestionar los avales que había presentado el que hasta ahora era su rival, Tomás Medina.
Los congresos regionales proseguirán el siguiente fin de semana, el del 25 y 26 de marzo, con los cónclaves que tendrán lugar en Extremadura, Ceuta, Cantabria, Aragón, Cataluña e Islas Baleares. Y concluirán el del 1 el 2 de abril en Comunidad Valenciana, Melilla y Castilla y León. La principal novedad en este último será que, por primera vez en más de 13 de años, el candidato no será Juan Vicente Herrera. La pelea será entre los alcaldes de León y Salamanca, Antonio Silván y Alfonso Fernández Mañueco, respectivamente.