Por Cambio16
09/01/2017
El papa Francisco pidió este lunes frente al cuerpo diplomático acreditado en el Vaticano «gestos valientes» por la paz y el diálogo en Venezuela. También denunció la «locura homicida» del «terrorismo fundamentalista» y pidió una «generosa acogida» de los refugiados en Europa.
En el tradicional discurso de inicio de año frente a representantes de 182 países, que el papa dedicó a «la seguridad y la paz», denunció el «terrorismo de matriz fundamentalista, que produjo numerosas víctimas en todo el mundo».
«Son gestos viles, que usan a los niños para asesinar, como en Nigeria; toman como objetivo a quien reza, como en la Catedral copta de El Cairo, a quien viaja o trabaja, como en Bruselas, a quien pasea por las calles de la ciudad, como en Niza o en Berlín, o sencillamente celebra la llegada del año nuevo, como en Estambul«, explicó Francisco.
El pontífice hizo también un llamamiento a las autoridades religiosas para que reafirmen «que nunca se puede matar en nombre de Dios».
«El terrorismo fundamentalista es fruto de una grave miseria espiritual», consideró.
Francisco también pidió por la paz en Medio Oriente y para que Europa haga una «acogida generosa para refugiados y emigrantes» con el fin de que se puedan integrar en el tejido social.
«Los emigrantes no son números, son personas, con nombres, historias y familias», consideró.
Con respecto a Venezuela, donde se mantuvieron en 2016 reuniones entre el gobierno y la oposición auspiciadas por el Vaticano, el papa pidió «gestos valientes» a favor del diálogo y la paz para frenar las «consecuencias de la crisis política, social y económica» que afectan a la población.
«La paz, sin embargo, se conquista con la solidaridad. Pienso en el esfuerzo llevado a cabo con tenacidad, a pesar de las dificultades, para terminar con años de conflicto en Colombia», dijo en relación al acuerdo logrado entre el gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC que puso fin a 52 años de conflicto armado.
En esa línea, Francisco concluyó finalmente con un deseo de «paz verdadera» para el 2017.