Por Cambio 16
La guerra de la rosa por el control interno del PSOE ha resucitado esta semana sobre todo después de que trascendiera el fichaje de la exdiputada de UPyD, Irene Lozano, por parte del secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, para que la primera ocupe el número cuatro de la lista del PSOE por Madrid en las próximas elecciones generales.
Las rencillas y la batalla entre Sánchez y la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, quedaron de manifiesto el mismo viernes, cuando los socialistas andaluces se negaron a refrendar la incorporación de Lozano en las planchas de su partido durante la reunión de la Comisión Federal de Listas. Y se reflejarán este sábado durante el Comité Federal –máximo órgano entre congresos– que reúne en Madrid.
La mano derecha de Díaz y secretario de Organización del PSOE andaluz, Juan Cornejo, se marchó deliberadamente de la votación para no apoyar la inclusión de la ex de UPyD porque, tal y como aseguró después en declaraciones a la Cadena Ser, Lozano «ha insultado» a los andaluces en distintas ocasiones, cuando ha criticado la gestión de los socialistas y su supuesta implicación en casos de corrupción.
Vara le exige que pida perdón
La decisión del líder socialista, Pedro Sánchez, de sumar a Lozano ha generado así una auténtica polvareda cuando parecía que el partido iba a aprobar sus candidaturas hoy, en el Comité Federal, en un ambiente de tranquilidad, informa Efe. El presidente de Extremadura y líder de los socialistas extremeños, Guillermo Fernández Vara, ha reconocido la capacidad de Sánchez para hacer las listas e incluir a personas que puedan aportar, pero también ha defendido la legitimidad de los militantes a expresar su malestar después de las críticas vertidas por Lozano en los últimos cuatro años contra el bipartidismo que representan PSOE y PP.
«Lo primero que tiene que hacer Irene Lozano es pedir perdón, disculparse, ante miles de militantes socialistas honrados que nos hemos sentido ofendidos en muchas ocasiones por sus descalificaciones durante cuatro años», aseveró el líder de los socialistas extremeños en declaraciones al diario El País.
El «buen hacer» de la exdiputada
La dirección del PSOE subrayó, por su parte, que la incorporación de Lozano es «muy enriquecedora» por su «buen hacer» y el trabajo «en favor de la democracia y la modernización de las instituciones» que ha hecho durante esta legislatura con UPyD. En un comunicado, el PSOE ha destacado que la política madrileña es «una persona que ha demostrado su compromiso con una sociedad que reclama transparencia, honradez y el fin de la corrupción».
Lozano explicó ayer que su decisión de irse al PSOE responde a que ve en los socialistas un proyecto de cambio «serio y creíble» por abandonar la «cerrazón» y contar con personas «independientes» como ella. En declaraciones en el Congreso tras renunciar a su escaño por UPyD, Lozano ha asegurado que desde el PSOE seguirá haciendo el mismo trabajo que hizo con la formación magenta en favor de la regeneración de las instituciones.