POR CAMBIO16
19/09/2016
La tercera edición de la conferencia Nuestro Océano, que ha reunido en Washington (Estados Unidos) a representantes de 90 países, se cerró con compromisos valorados en más de 5.300 millones de dólares para esfuerzos de conservación de los océanos, y con la protección de 3,4 millones de kilómetros cuadrados de aguas.
«Para proteger los ecosistemas marinos, prevenir la contaminación y afrontar los efectos devastadores del cambio climático, esta conferencia sobre los océanos ha comprometido más de 5.300 millones de dólares en dinero e iniciativas», apuntó el secretario de Estado estadounidense, John Kerry.
El Gobierno estadounidense, que creó en 2014 la conferencia internacional Nuestro Océano para impulsar políticas relacionadas con la pesca sostenible y el combate a la contaminación marítima, quería lograr un buen resultado en la cumbre que acoge con Barack Obama en el poder.
El mandatario quiso dar ejemplo al anunciar la creación de la primera área marina protegida que Estados Unidos establece en su costa atlántica, y que resguardará 12.725 kilómetros cuadrados en las costas de Nueva Inglaterra, donde la pesca y otras actividades estarán limitadas para preservar el ecosistema local.
Con esa contribución y la de otra veintena de países, la conferencia se cerró, según el Departamento de Estado de Estados Unidos, con la creación de «más de 3,4 millones de kilómetros cuadrados» en áreas marinas protegidas, algunas de ellas anunciadas ya hace tiempo pero promocionadas de nuevo por sus Gobiernos en la conferencia.
Kerry defendió la idea de que la conservación del océano es un tema de «seguridad nacional«, de «vida o muerte«, porque los efectos de la contaminación de los océanos y la pesca abusiva o ilegal repercuten en todo el mundo.
«Si no le prestamos atención, habrá aún más refugiados por el clima, y más retos en la seguridad alimentaria a medida que el pescado del que la gente depende para obtener sus proteínas desaparezca», afirmó Kerry en un foro paralelos a la conferencia celebrado en la Universidad de Georgetown.
El secretario de Estado estadounidense alertó de que, si se sigue a este ritmo, habrá más plástico que peces en el océano en 2050. En ese sentido, varios países aprovecharon la conferencia para anunciar medidas para evitar que eso ocurra.
Por ejemplo, la Unión Europa indicó que reducirá a la mitad el número de bolsas de plástico de un solo uso en sus países miembros para 2019, y Marruecos recordó que el pasado mes de julio entró en vigor en todo el país un veto a la producción o uso de bolsas de plástica.
Francia, a través de su ministra de Medio Ambiente, Ségolène Royal, anunció la prohibición de todas las bolsas de plástico de un solo uso que sea más finas que 0,05 milímetros, mientras que Senegal tomó la misma medida con las menos de 0,03 milímetros y Ghana con las de 0,02 milímetros.
Por otra parte, Estados Unidos declaró que iniciará negociaciones en la Organización Mundial del Comercio (OMC) junto a otros 12 países para prohibir los subsidios pesqueros que contribuyan a la captura abusiva o estén relacionados con la pesca ilegal.
En esas negociaciones participarán Argentina, Chile, Colombia, Perú, Uruguay, Australia, Canadá, Nueva Zelanda, Noruega, Papúa Nueva Guinea, Singapur y Suiza, según explicó el representante de Comercio Exterior de EEUU, Michael Froman.
«Anticipamos que otros miembros de la OMC preocupados por la conservación (de los océanos) se unirán a estas negociaciones y trabajarán por un acuerdo ambicioso», indicó Froman, y precisó que las negociaciones partirán de los estándares marcados por el tratado comercial Acuerdo de Asociación Transpacífica (TPP).
El ministro de Medio Ambiente de Ecuador, Walter García, defendió los «gigantescos pasos hacia la conservación» en su país y abogó por la creación de «más santuarios marinos».
García recordó que, en marzo pasado, el Gobierno ecuatoriano inauguró un área especial de protección en el archipiélago de Galápagos, entre las islas Darwin y Wolf, para proteger un lugar que alberga la mayor biomasa de tiburones del planeta.
Según el Departamento de Estado, esa zona cubre unos 40.000 kilómetros cuadrados, y de acuerdo con García, tiene «el tamaño de Bélgica» y supone un 33% de aumento en la zona de Galápagos donde la extracción petrolera está prohibida.
Por su parte, el embajador de Colombia en Estados Unidos, Juan Carlos Pinzón, llevó a la conferencia el anuncio hecho la semana pasada por el Gobierno colombiano de que el área protegida del Santuario de Fauna y Flora de Malpelo, en el océano Pacífico, se «cuatriplicará, de 6.763 kilómetros cuadrados a más de 27.000».
La UE acogerá la conferencia de los océanos en 2017, que probablemente se celebrará en Malta, mientras que las ediciones siguientes tendrán lugar en Indonesia y Noruega.