Por: Cambio 16
3/11/2016
Desde el miércoles por la noche un grupo de jóvenes pertenecientes al Partido de Gobierno (PSUV), se instaló en un campamento en la entrada del Palacio de Miraflores para apoyar la gestión del presidente venezolano Nicolás Maduro.
Integrantes de la Juventud PSUV, levantaron sus tiendas en la sede de Gobierno el día previo a la marcha que se había convocado hacia a ese lugar por parte de la oposición.
Los jóvenes chavistas pretenden estar al menos hasta el fin de semana en Miraflores, y para entretenerse desarrollarán actividades recreativas y educativas.
Este no será el único lugar donde se instalarán campamentos, el PSUV pretende colocarlos en otras ciudades del país.
“Vamos a seguir con la instalación de campamentos estadales para seguir apoyando irrestrictamente el Gobierno de nuestro presidente Nicolás Maduro”, dijo la coordinadora nacional de la Juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela, Andreína Tarazón.
La movilización opositora pautada para este jueves, fue suspendida por petición del Vaticano, ésta pretendía entregarle “la carta de despido a Maduro”, según integrantes del partido Mesa de la Unidad.
Sin embargo, un grupo de líderes universitarios convocaron una manifestación para hoy con el fin de rechazar la postergación de la recolección de firmas para activar el Referendo Revocatorio contra Maduro. Hasler Iglesias, presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela, la más importantes del país, informó que la marcha no tiene como punto de llegada el Palacio de Miraflores.
Bloqueos en autopistas y subterráneo
Pese a la suspensión de la movilización que pretendía llegar a Miraflores, la Guardia Nacional instaló puntos de control en carreteras y autopistas que conectan con Caracas, la capital.
Los bloqueos, generaron fuerte tráfico y molestias en los habitantes que viven en las ciudades dormitorios.
Asimismo, estaciones del Metro de Caracas (subterráneo administrado por el Gobierno) cercanas a los lugares donde se concentrarán los estudiantes opositores, fueron cerradas bajo el argumento de “resguardar las instalaciones”.