Por Andrés Tovar
14/06/2017
El Brexit no ha llegado, de hecho, las negociaciones sobre el divorcio entre el Reino Unido y la Unión Europea ni siquiera han comenzado, pero el costo económico de la votación se pone rápidamente al día con el público británico.
En junio de 2016, cuando Reino Unido votó su voluntad de salirse de la UE, la tasa anual de inflación en alimentos y bebidas no alcohólicas era de -2,9%. Casi un año después, los últimos datos de mayo de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, por sus siglas en ingles) de ese país muestran que la tasa ha aumentado hasta el 2,1%, la más alta desde noviembre de 2013.
La inflación en los alimentos está aumentando rápidamente. A principios del año, la tasa seguía siendo negativa y había sido así durante casi tres años, a tal punto que los supermercados de descuento ejercían una fuerte presión sobre las grandes cadenas de tiendas y provocó en su momento una guerra de precios de supermercados a nivel nacional.
Esos días han terminado, reseña Bloomberg. La caída de la libra desde el referéndum de la UE y acentuada después de los resultados en las elecciones británicas ha hecho subir los precios de importación; algunas tiendas han respondido mediante la eliminación de marcas conocidas y advirtiendo que los precios de varios productos subirán.
Esta es una señal del «momento difícil» en Reino Unido, donde los preparativos para un posible tortuoso Brexit no solo es un asunto del gobierno y de las instituciones británicas, sino también de los hogares, advirtió el banco central. También muestra el efecto desproporcionado que el Brexit está teniendo en la población. El año pasado, los hogares de menores ingresos gastaban el 17% de su gasto total en alimentos y bebidas no alcohólicas, comparado con el 8% de los hogares con los ingresos más altos. Ahora van a sentir la fuerza de esta inflación mucho más.
Por cierto, los multimillonarios de Gran Bretaña están cada vez más ricos ya que la moneda más débil impulsó el mercado de valores del Reino Unido a niveles récord y el aumento de las ganancias de las inversiones en el extranjero. Los últimos datos de la inflación añaden sal a la herida para el nuevo gobierno del Reino Unido, que se enfrentan a la negociación Brexit desde una posición inestable, mientras que la economía alrededor de ellos se hace más débil y el público se siente más pobre. Y apenas comienza todo…