Matadero Madrid y la Colección SOLO organizan una exposición colectiva que revisita la inagotable imaginería y la riqueza simbólica del tríptico El jardín de las delicias, de El Bosco, y evidencia la capacidad del pintor flamenco de proponer un retrato social trasladado a nuestro tiempo. La muestra reunirá trabajos de una quincena de artistas internacionales, cuyas obras forman parte de los fondos de la Colección SOLO, entre los que se encuentran SMACK, Mario Klingemann, Miao Xiaochun, Cassie McQuater, Filip Custic, Lusesita, Mu Pan o La Fura dels Baus-Carlus Padrissa.
El jardín de las delicias lleva cinco siglos cautivándonos. El tríptico de El Bosco (1450-1516) despliega ante nosotros un mundo fantástico, cargado de imaginación y simbología, que nos invita a reflexionar, afinar el ingenio y abrir múltiples hilos de conversación. Expuesto en el Museo Nacional del Prado, El jardín de las delicias (1500-1505) ha mantenido su valor a lo largo de los siglos, convirtiéndose en una palanca para la inspiración de diferentes movimientos y artistas, en especial del surrealismo.
Hoy sigue ejerciendo su influencia en la creación contemporánea, que lo actualiza y lo convierte en un espejo de nuestro tiempo. Las piezas de El jardín de las delicias, un recorrido a través de las obras de la Colección SOLO muestran la influencia del original y nos acompañan para volver a él, revisarlo y redescubrirlo desde medios y cosmovisiones contemporáneas. Una quincena de artistas, de distintos puntos del planeta, se reúnen en esta muestra que se puede ver en la imponente Nave 16 de Matadero Madrid completamente transformada.
La delegada de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, Andrea Levy, junto a la directora de Matadero Madrid, Rosa Ferré, y el director de desarrollo de la Colección SOLO, Óscar Hormigos, presentaron en este espacio municipal la exposición. La muestra, que se podrá ver hasta el próximo 27 de febrero de 2022, invita a volver a la obra maestra de El Bosco y revisitarla desde la creación contemporánea.
La Colección SOLO, un proyecto internacional de apoyo a la creación contemporánea que tiene su sede en Madrid, ha comisionado y coleccionado propuestas artísticas vinculadas a El jardín de las delicias desde 2016. Como parte de sus líneas de acción, ha impulsado obras y reflexiones en torno al tríptico en medios como la animación digital, la creación sonora, la inteligencia artificial, la pintura o la cerámica. Todas ellas proponen una revisión actual que celebra la inagotable imaginería y riqueza simbólica de una pieza fascinante capaz de proponer un retrato social adaptado a nuestro tiempo.
Durante la presentación, que contó con la presencia de varios artistas como Mario Klingemann, el colectivo SMACK, Carles Padrissa, Lusesita y Filip Custic, Andrea Levy destacó que “el rigor y el interés de estas nuevas producciones han permitido una fructífera colaboración con Matadero en su apuesta por la creación más experimental y la digital”. Así, señaló que esta propuesta, desde diferentes lenguajes creativos actuales, “nos ofrece la perspectiva única de cada uno de los artistas presentes, pero también renueva la fascinación de una de las obras maestras del Museo del Prado”.
La presentación, que contó con la presencia de varios artistas como Mario Klingemann, el colectivo SMACK, Carles Padrissa, Lusesita y Filip Custic, Andrea Levy destacó que “el rigor y el interés de estas nuevas producciones han permitido una fructífera colaboración con Matadero en su apuesta por la creación más experimental y la digital”.
Las obras de los artistas SMACK, Mario Klingemann, Miao Xiaochun, Cassie McQuater, Filip Custic, Lusesita, La Fura dels Baus-Carlus Padrissa, Mu Pan, Dan Hernández, Cool 3D World, Sholim, Dustin Yellin, Enrique del Castillo, Dave Cooper y Davor Gromilovic conforman una nueva mirada, desde el presente, a la obra maestra del siglo XVI. La muestra propone al espectador una reflexión vinculada a los valores universales que la pintura original ha mantenido a lo largo de la historia. Lo hace a través de medios como la inteligencia artificial, el arte sonoro, la animación digital, la pintura, la escultura o la instalación.
Las distintas aproximaciones, evocaciones y reinterpretaciones visionarias de las piezas formarán una experiencia expositiva, cuyo diseño arquitectónico corre a cargo de estudio Herreros, que permitirá descubrir la riqueza constructiva y sus inagotables capas de interpretación del tríptico original. Asimismo, su potencial simbólico y su capacidad de ofrecer una visión contemporánea de la obra.
DEL ARTE SONORO A LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL
Una composición sonora sobre celuloide introduce al espectador en El jardín. Se trata de una obra del artista jiennense Enrique del Castillo que, sobre una instalación de lectores ópticos y celuloide, recupera extractos sonoros de Josquin Despriez y Adrian Willaert, compositores coetáneos a El Bosco. La instalación da paso a una interpretación de El jardín de las delicias creada gracias a la inteligencia artificial por Mario Klingemann, artista alemán referente mundial en la creación artística con inteligencia artificial. La obra The Garden of Ephemeral Details juega en directo con la percepción y la memoria del espectador en ‘Una invitación para los sentidos’, primera de las etapas de la muestra.
FILIP CUSTIC. Alpha, 2021 LUSESITA. El Jardín de las Delicias, 2020
En este ámbito se sitúa también la instalación inmersiva site specific que ha creado para la muestra La Fura del Baus-Carlus Padrissa. La escultura y la pintura de los artistas Lusesita y Dave Cooper componen, a continuación, ‘Deliciosa Tentación’, un espacio dedicado a las obras que se despojan del moralismo satírico de la obra original y nos llevan a un paraíso exento de culpa. Las creaciones en formato gif del serbio Sholim y la animación digital del colectivo Cool 3D World sitúan al espectador en el punto de enlace entre las corrientes surrealistas y el tríptico de El Bosco.
El artista chino Miao Xiaochun firma una instalación de vídeo en el espacio dedicado a los microcosmos y utopías que emergen desde El jardín de las delicias. Filip Custic, artífice del ecosistema visual de la cantante Rosalía, presenta un jardín en videoinstalación que retrata la historia de la humanidad y se pregunta sobre nuestro destino. Mientras, la obra en collage de Dustin Yellin y la pintura inspirada en la estética arcade de Dan Hernández completan esta parte del recorrido. Lo hacen junto a la obra de la norteamericana Cassie McQuater, una apuesta por el formato de videojuego de los años 90 para evocar las expresiones del tríptico. Nuevas historias y personajes se cuelan en un jardín contemporáneo y lo repueblan en las creaciones de Davor Gromilovic y del artista taiwanés residente en Nueva York, Mu Pan, cuya obra ofrece su retrospectiva vital inspirada en la obra original.
ANIMACIÓN A GRAN FORMATO
El colectivo holandés SMACK firma SPECULUM, una obra de animación digital en gran formato que cierra El jardín de las delicias, un recorrido a través de las obras de la Colección SOLO. Tal y como recogen algunos análisis sobre la pieza original, utilizada como inductor de conversaciones en la época, SPECULUM invita a una conversación descarnada sobre nosotros y la sociedad que hemos construido. El tríptico digital, comisionado por el Museo Stedelijk (anteriormente llamado MOTI) de Breda y la Colección SOLO, despliega un gran jardín contemporáneo cargado de referencias de la cultura popular actual que nos sitúa con crudeza en nuestro mundo.
Presentado en 21 metros de pantalla nos enfrentan a un edén, un paraíso y un infierno tan reconocibles que nos apelan implacablemente.
UN LABERINTO PARA PERDERSE EN ‘EL JARDÍN’
El diseño de la instalación, realizado por estudio HERREROS, dispone las obras expuestas en un recorrido laberíntico de fácil seguimiento que potencia el descubrimiento y la sorpresa. La organización espacial se construye con muros de cartón de embalaje, un material sencillo cuya simplicidad constructiva contrasta con la sofisticación tecnológica de las piezas expuestas. Con ello, el montaje estimula la pérdida de referencias respecto del exterior acentuando la sensación de habitar un mundo onírico y fabuloso que culmina con la gran plaza pavimentada en azul eléctrico presidida por la versión que el colectivo SMACK ofrece del famoso tríptico.
Estudio HERREROS es un despacho de arquitectura con sede en Madrid, Nueva York y Ciudad de México, con una dilatada experiencia en proyectos relativos al mundo del arte. Entre sus próximas citas se encuentra la inauguración del nuevo Museo Munch en Oslo, el museo más importante del mundo dedicado a un solo artista, cuyo proyecto y construcción se ha extendido a lo largo de 12 años.
SMACK, SPECULUM: Hell, 2019 CASSIE MCQUARTER. Angela’s Flood, 2020
El estudio firma también el espacio para la colección SOLO en Madrid que fue Premio de Arquitectura del Colegio de Arquitectos de Madrid; la galería de arte contemporáneo Carreras Múgica en Bilbao, Premio de Arquitectura del Colegio Vasco Navarro, y la remodelación de museos como el MALBA de Buenos Aires y el Reina Sofía de Madrid. En la actualidad, estudio Herreros diseña un nuevo espacio para SOLO en Madrid y la sede de una importante colección de arte en el País Vasco.
La exposición se complementa con una publicación editada por la Colección SOLO en la que se abordarán las obras que componen la muestra y su contexto en el arte contemporáneo y en relación con la pieza original.