El mercado inmobiliario británico se colapsaría y los tipos de las hipotecas se dispararían. Es el escenario que plantea el gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, al Ejecutivo de Theresa May en caso de un Brexit “caótico”. La falta de acuerdo con la Unión Europea supondría una caída del precio de las viviendas del 35 por ciento en tres años. Así lo ha dicho Carney para el diario The Times.
Las últimas señales de Bruselas han generado esperanzas de que el Reino Unido y las autoridades de la UE puedan aprobar un acuerdo en los próximos meses; concretamente, antes de la salida prevista para el 29 de marzo. No obstante, las partes todavía están divididas sobre una quinta parte de los detalles en negociación.
Pero muchos directivos empresariales e inversores temen que los intereses políticos puedan poner obstáculos; empujando a la quinta economía más grande del mundo a un divorcio sin acuerdo. De ser así, en opinión de Carney, debilitaría a Occidente, asustaría a los mercados financieros y obstruiría las arterias del comercio.
Ruptura “limpia” con la UE
Entretanto, la primera ministra Theresa May intenta llegar a un acuerdo con Bruselas. En casa se enfrenta a los sectores críticos de su propia formación, el Partido Conservador. Estos sostienen que rechazarán cualquier acuerdo que no suponga una ruptura “limpia” con la UE.
Asimismo, Carney ha dicho al Gobierno de May, que el impacto de un Brexit sin acuerdo podría ser tan catastrófico como la crisis financiera de 2008.
El pasado mes, el gobernador alegó que un Brexit desordenado era «altamente indeseable”. Aunque admitía que la posibilidad de que suceda es «incómodamente alta».
Carney dirigirá el Banco de Inglaterra hasta 2020
Mark Carney permanecerá en como gobernador del Banco de Inglaterra hasta finales de enero de 2020. En este sentido, dirigiría el banco central durante 10 meses tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
«Estoy dispuesto a hacer todo lo que pueda para promover tanto un Brexit exitoso como una transición efectiva en el Banco de Inglaterra», aseguraba Carney. Estas declaraciones justifican su intención de alargar su mandato, sobre el que en su momento dijo que finalizaría en 2018.
Nuevos pasaportes
Según el diario The Guardian, los británicos podrían empezar a recibir pasaportes “post-Brexit” a partir de 2019; sin embargo reconoce que no hay confirmación ni garantías al respecto todavía.
Los pasaportes impresos entre el 30 de marzo de 2019 y la introducción del nuevo diseño serán de color burdeos; pero ya no incluirán «Unión Europea» en la portada.
Con información de Reuters.
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