En las profundidades del océano Pacífico, específicamente en la costa oeste de América del Norte, desde Alaska hasta Baja California, México, se encuentra el bacalao rojo o cocodrilo del Pacífico. Un pez irritable de unos cuatro pies de largo que con frecuencia se dedica al canibalismo. Un nuevo estudio revela que, a pesar de ser un depredador por naturaleza, mantiene sus dientes afilados y brillantes pues reemplaza alrededor del 3% de ellos cada día.
En promedio, diariamente el bacalao rojo del Pacífico pierde y gana unos 20 dientes. Y esta tasa de reemplazo sorprende a los investigadores ya que si los humanos tuviéramos el mismo esquema dental, reemplazaríamos un diente a diario. Lo más raro, según el estudio publicado en octubre en Proceedings of the Royal Society B, es que la mayoría de los peces tienen dientes como los del bacalao rojo. Por lo tanto, podría ser que la mayoría de los peces estén perdiendo cantidades masivas de dientes diariamente y reemplazándolos rápidamente, como esta especie.
El reemplazo de dientes en los peces
Los investigadores de la Universidad de Washington aseguran que están al tanto sobre el reemplazo de dientes en los peces. Esto es algo que proviene de los tiburones, que tienen múltiples filas de dientes dentro de sus mandíbulas que se reponen constantemente. Sin embargo, existen otros peces con dientes inusuales que comúnmente difieren de manera significativa de los que poseen los tiburones.
El bacalao rojo del Pacífico tienen un conjunto de mandíbulas superior e inferior, como las de los humanos, pero son más móviles, según el estudio. Estos peces pueden lanzarse hacia adelante y extenderse y si miras el interior de la boca en su paladar, también está cubierto de dientes. Luego, hasta la parte posterior de la garganta están las mandíbulas faríngeas. Unas plataformas óseas tachonadas de dientes hechas de arcos branquiales modificados.
Cuando el también llamado «cocodrilo del Pacífico» ataca, su primer conjunto de mandíbulas se dispara hacia adelante y arrastra a la presa a la boca. Allí, las mandíbulas faríngeas internas se ponen a trabajar triturando y pulverizando. Para ello, el bacalao rojo utiliza su dentadura perfectamente afilada como agujas, pero estos son propensos a romperse. Por tanto, parece que la estrategia para que su mordida sea completamente eficiente se basa en que le crezcan nuevos dientes cada día.
El nuevo hallazgo sobre la dentadura del bacalao rojo del Pacífico podría ayudar a los científicos a comprender mejor el fenómeno del reemplazo de dientes en los peces.
Estudios para conocer la dentadura del cocodrilo del Pacífico
Para llevar a cabo la investigación, los autores utilizaron una secuencia de tintes para crear una línea de tiempo visual del crecimiento de los dientes de esta especie. Comenzaron sumergiendo 20 juveniles de bacalao rojo en tanques enriquecidos con el tinte fluorescente rojo de alizarina durante 12 horas. El resultado fueron cientos de relucientes dientes de color rojo brillante.
Durante los siguientes 10 días, algunas especies de bacalao rojo fueron expuestos a un segundo colorante verde, calceína fluoresceína. Los dientes colocados en su lugar el primer día del estudio se tiñeron de rojo, mientras que los dientes que erupcionaron más tarde parecían verdes. Posteriormente, contaron y clasificaron minuciosamente cada diente, para obtener un total de 10.580 dientes en los 20 peces examinados.
Los resultados revelan que los dientes de bacalao rojo están predestinados. Es decir, cada diente nace exactamente donde está destinado a pasar el resto de su vida útil. Eso es contrario a otros famosos peces con dientes como el gran tiburón blanco, cuyos dientes comienzan siendo pequeños en la parte posterior de la mandíbula. Además, avanzan a medida que crecen, indicaron los científicos. También descubrieron que hay un reemplazo más rápido en aquellas áreas donde se espera que haya una mayor fuerza cuando muerde.
¿Qué determina que ya es hora de reemplazar sus dientes?
Podría pensarse que el reemplazo de dientes en el cocodrilo del Pacífico es a diario y de manera automática, pero ¿cómo y por qué ocurre? Para determinarlo, los autores realizaron una segunda condición experimental en el estudio donde compararon peces que fueron alimentados regularmente con otro grupo de peces a los que no se les dio nada para comer.
Los resultados no arrojaron diferencias significativas en la tasa de reemplazo de dientes entre ellos. Lo cual sugiere que al bacalao rojo del Pacífico no le brotan dientes en respuesta a la rotura. En su lugar, es algo similar al reemplazo de los dientes de leche y adultos en los humanos, que se caen y erupcionan según un temporizador genético.
Todo sobre el bacalao rojo del Pacífico
El cocodrilo del Pacífico tiene carne verde o azul fluorescente, mide 1,2 metros de largo y se encuentra en su edad adulta. Su hallazgo es económicamente importante para los pescadores de la costa oeste de América del Norte pues es extremadamente delicioso y queda «excelente dentro de un taco».
El bacalao rojo del Pacífico es un depredador de pies a cabeza, «come cualquier cosa que pueda meterse en la boca», explica la coautora del estudio Karly Cohen, quien es estudiante de doctorado en la Universidad de Washington y estudia la biomecánica de la alimentación.
Para realizar la investigación, los autores dijeron que no es un pez del todo encantador y se comporta como un caníbal. «Tuvimos que poner cinta adhesiva en las esquinas de los tanques porque cuando pasaba cerca, intentaban saltar… nunca me mordieron, pero estoy segura de que lo habrían hecho si hubieran tenido la oportunidad», asegura Emily Carr, estudiante de pregrado en la Universidad del Sur de Florida y autora principal del estudio.