Por Cambio16
20/02/2018
Los dispositivos para ametralladoras protagonizan la nueva polémica estadounidense. Este 20 de febrero, Donald Trump ordenó al fiscal general de Estados Unidos Jeff Sessions que «proponga regulaciones para prohibir todos los dispositivos para convertir las armas legales en ametralladoras». Se estaba refiriendo a los llamados bump stock. Un dispositivo que puede modificar un rifle semiautomático para disparar hasta 800 balas por minuto.
La declaración de Trump se produce en medio de las crecientes solicitudes de control de armas en Estados Unidos, luego de que 17 estudiantes murieran la semana pasada en Parkland, Florida, por un ex compañero de clase armado con un arma semiautomática. No obstante la solicitud de Trump enfrenta un muro legal. El Departamento de Justicia no tiene la facultad legal para prohibir estos dispositivos por su cuenta. Asimismo, los intentos de llevar una moción similar en el Senado no han surtido efecto. Por ende, Trump asumió la responsabilidad hoy directamente en Sessions durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca. «Espero que estas regulaciones críticas se finalicen, Jeff, muy pronto», dijo Trump, hablando con el fiscal general.
BREAKING: Trump says he has ordered Atty Gen Jeff Sessions to make regulations banning sales of bump stocks. pic.twitter.com/nwU5dYvqXl
— Steven Portnoy (@stevenportnoy) February 20, 2018
El debate sobre los dispositivos para ametralladoras ha estado en la agenda estadounidense desde finales del año pasado. Específicamente tras el Tiroteo en Las Vegas, donde un pistolero armado con armas múltiples mató a 58 personas. Las armas automáticas o ametralladoras son ilegales en los EEUU, Pero las armas semiautomáticas como el AR-15 utilizadas en el tiroteo en Florida no lo son.
Los dispositivos para ametralladoras apuntan a la Ley
Aunque las versiones anteriores son técnicamente legales para poseer, comprar y vender en muchos estados, las nuevas «ametralladoras» -definidas por la ley como armas totalmente automáticas capaces de disparar más de un disparo por disparo de gatillo- no han estado disponibles para la venta o compra para uso civil en los Estados Unidos desde la Ley de protección de los propietarios de armas de fuego de 1986.
Sin embargo, las existencias adicionales -dispositivos para ametralladoras que fueron adquiridos antes de la ley- no tienen actualmente ninguna regulación.
En aquel diciembre, el propio Jeff Sessions se refería a los dispositivos para ametralladoras. «Pasaremos por el proceso regulatorio que exige la ley y estaremos atentos a las aportaciones del público», dijo en esa oportunidad. Incluso la polémica Asociación Nacional del Rifle -NRA, el influyente lobby pro-armas civiles- estuvo de acuerdo en una regulación. «La ANR cree que los dispositivos diseñados para permitir que los rifles semiautomáticos funcionen como rifles totalmente automáticos deberían estar sujetos a regulaciones adicionales» dijeron en un comunicado.
Vuelta de tuerca al control de armas
Desde entonces, las autoridades han dicho públicamente y en privado que la prohibición de las existencias adicionales no puede lograrse unilateralmente. Argumentan que el Congreso necesita aprobar una legislación. Y con las constantes diatribas entre Repúblicanos y Demócratas, no está claro si el apoyo de Trump a la idea sería suficiente para aprobar una legislación en el Congreso esta vez. Aunque debería.
Mientras tanto, los legisladores del estado de Florida votaron hoy en contra de un proyecto de ley que prohibiría los rifles de asalto, como lo observaban los estudiantes de la escuela secundaria de Parkland.
After school shooting, Florida legislators vote down assault rifle ban bill https://t.co/p3G7xp9CiC pic.twitter.com/otdx0jEqYJ
— News 6 WKMG (@news6wkmg) February 20, 2018
Pero especialmente relevante es el giro que parece mostrar Trump. El mandatario apoya a la NRA y evitó hablar del control de armas en su primero año de gestión. Ahora parece querer tomar un papel más activo tras lo sucedido en Florida.
El lunes expresó su apoyo a un proyecto de ley que aumente eficacia de la base de datos nacional sobre antecedentes criminales para impedir que las personas allí incluidas puedan comprar armas. Y este miércoles recibirá en la Casa Blanca a estudiantes y profesores de varias escuelas del país. Entre ellos miembros de la escuela de Florida y otras afectadas por otros tiroteos. En la lista hay miembros de las lamentablemente célebres Sandy Hook y Columbine.