Estados Unidos es uno de los países más generadores de desechos plásticos. Aunque los volúmenes se han reducido y reorientado en el resto del mundo, la Casa Blanca escogió una estrategia a largo plazo para disminuir la contaminación por plásticos. Su proceder será lento. Se propone eliminar gradualmente el plástico de un solo uso de todas las actuaciones oficiales para 2035. Entonces el Gobierno Federal será libre de plásticos de un solo uso, no la nación, no los estadounidenses en general.
Una investigación, publicada en Science Advances, determinó que los estadounidenses deben trabajar mucho más para administrar su basura. Estima que China puede ser el fabricante de plásticos más grande del mundo, pero EE UU, sin duda, es el mayor generador de basura plástica.
La nueva estrategia se difundió horas antes de la dimisión de Joe Biden a la reelección. “El gobierno federal está reconociendo la gravedad de la contaminación plástica y el tamaño de la respuesta que se requerirá para enfrentarla”, dijeron Brenda Mallory y Ali Zaidi, funcionarios ambientales y climáticos de la Casa Blanca. Ambos consideran necesario abordar los impactos del plástico, desde la producción hasta su desecho.
La producción de plástico y sus residuos se han más que duplicado en las últimas dos décadas. Se espera que se cuadrupliquen para 2050.
EE UU admite la contaminación por plásticos
La estrategia presentada por la Casa Blanca no contiene medidas que reduzcan directamente la producción, sino que respalda una regulación más estricta de los contaminantes del aire y el agua provenientes de las plantas de producción de plástico y el apoyo a la investigación sobre alternativas al plástico y la inversión en mejoras en la gestión de residuos.
Los defensores del medio ambiente elogiaron al equipo de Biden por explicar el alcance del problema de los plásticos, pero criticaron que las medidas anunciadas no son las que se necesitan para detener la creciente contaminación. «Parece ir más lejos que cualquier acción anterior, pero necesitan asegurarse de que las acciones que tomen sean proporcionales a la urgencia del problema», espetó Jen Fela, vicepresidenta de programas y comunicación de Plastic Pollution Coalition.
El principal grupo comercial de la industria del plástico se quejó. Considera que el gobierno ha ido demasiado lejos. «Estamos decepcionados por el anuncio de la Casa Blanca de que eliminará arbitrariamente el plástico con el falso pretexto de un menor impacto ambiental», dijo Matt Seaholm, presidente y director ejecutivo de la Asociación de la Industria del Plástico.
Afirmó que las empresas que representa están “dedicadas a mantener los desechos plásticos fuera del medio ambiente». Sugirió que el gobierno federal mejore la infraestructura de reciclaje en lugar de implementar prohibiciones arbitrarias que no abordan los desafíos ambientales. Su obligación es adelantar políticas sólidas que ayuden a lograr la circularidad”.
¿Decisión tardía y sin fuerza?
La Unión Europea prohibió en julio de 2021 los plásticos de un solo uso (pajitas, cubiertos, bastoncillos, etc.). Medidas similares se han expandido para revertir una situación que acumula casi 90.000 toneladas de basura solo en el océano Pacífico. La medida anunciada para la reducción de plásticos por la Administración de Servicios Generales de EE UU es débil para muchos ambientalistas. Pretende fomentar, en lugar de exigir, un menor uso de artículos desechables. Se limita a poner un nuevo icono en la etiqueta de los productos.
Los nuevos objetivos no tienen fuerza de ley y podrían ser abandonados por un futuro gobierno. La eliminación gradual del plástico de un solo uso se limita a la Administración Federal y sus operaciones de servicios de alimentos, eventos y envases para 2027, y de todas las operaciones federales para 2035. «Es un plan para un gobierno libre de plástico”, dijo Christy Leavitt, del grupo ambientalista Oceana.
Un paso adelante y muchas críticas
La nueva estrategia también hace referencia al tratado internacional sobre plásticos, cuyas negociaciones deben concluir este año. “Alcanzar un acuerdo global sólido puede ayudar a cambiar el rumbo del mar de contaminación plástica”, escribieron Mallory y Zaidi.
Estados Unidos ha enfrentado duras críticas por hacer muy poco para garantizar que surja un tratado sólido. Se ha unido a la industria de los combustibles fósiles para resistir un llamado a incluir límites a la producción de plásticos en el pacto y en la nueva estrategia no indica un cambio de postura.
Fela dijo que la nueva estrategia continúa lo que el gobierno ha venido haciendo durante décadas: centrarse en una mejor gestión de residuos de plástico en lugar de producir menos. “Es trapear el piso en lugar de cerrar el grifo, Para resolver el problema, necesitamos limitar la producción de plástico y Estados Unidos podría liderar esa opción, pero no es que lo están dispuestos a hacer”, explicó.
El nuevo documento de estrategia, llamado “Movilización de acciones federales contra la contaminación por plásticos: avances, principios y prioridades”, cita una serie de pasos en marcha. Por ejemplo, en el marco de la Ley de Empleo e Inversión en Infraestructura de 2021, el gasto de 275 millones de dólares de la Agencia de Protección Ambiental para mejorar la infraestructura de residuos sólidos para el reciclaje.
El documento señala que los defensores de la justicia ambiental han pedido acción durante años para atenuar la carga injusta de la contaminación de las plantas petroquímicas que soportan las comunidades pobres y de color.