Llevar una vida saludable incluye hábitos como tener una alimentación equilibrada y hacer ejercicios. Para una alimentación sana es necesario disminuir el consumo de alimentos preparados y dulces, básicamente.
Una encuesta realizada por el Instituto DYM, junto con WIN International, señala que en España durante 2019 se redujo considerablemente el porcentaje de compradores de alimentos poco saludables.
Señala el Instituto DYM que los comportamientos y hábitos de salud de las personas «están profundamente conectados» con el grado de vulnerabilidad que se puede sentir en situaciones como las actuales con la COVID-19. Los resultados de la encuesta sugieren que la alimentación y el cuidado sobre el tipo de comida que se compra es una preocupación que aumenta en el mundo.
Preocupación por una mejor alimentación
En España 42% de los encuestados compra comida preparada; 46%, dulces y 44% comida rápida, que es considerada poco saludable. Una combinación de azúcares, grasas, carbohidratos y sodio.
De acuerdo con la encuesta, el consumo de la comida preparada se ha incrementado en 8% y de comida rápida en 10%, porcentajes que siguen estando muy por debajo de la proporción de personas que afirman haber disminuido el consumo de estos alimentos poco saludables.
Lo que sí ha aumentado es el consumo de los alimentos que se consideran sanos. Los bajos en azúcares y grasas, y los alimentos orgánicos. Son más la personas que compran o consumen alimentos saludables en comparación con aquellas personas que han dejado de consumirlos.
La edad y la comida
Hay una tendencia generalizada en todas las edades a consumir comida más sana y a reducir la ingesta de alimentos menos saludables. Las tendencias señalan que entre las personas mayores de 65 años de edad ha aumentado el consumo de alimentos poco saludables entre 1% y 3%. También en esta franja etaria se observa que entre el 46% y el 54% la ingesta de alimentos preparados, dulces y comida rápida se ha reducido.
Los más jóvenes (edades comprendidas entre los 18 y 34 años) señalan que han aumentado del 21% al 32% el consumo alimentos orgánicos. Mientras tanto, solo 18% de las personas de la tercera edad afirman que han elevado la ingesta de productos orgánicos.
La encuesta también se hizo en más de 40 países. Los datos señalan que la tendencia al alza que hay en España de reducir la adquisición de alimentos poco saludables es mayor que en el resto del mundo y se ajusta a la media europea.
Los más jóvenes y la comida poco saludable
En el mundo, entre el 12% y el 14% de las personas afirman que consumen más productos como comida rápida, preparada o dulce. Entretanto, de un 37% a un 41% afirma que han disminuido ese consumo. La encuesta incluye la situación laboral para el consumo de alimentos.
Los que más reducen la ingesta de alimentos poco saludables son los jubilados, que se ubican entre el 44% y el 56%. Por su parte, los estudiantes son el grupo que menos ha aumentado la alimentación con comida sana (del 29% al 34%). Pero han elevado la ingesta de dulces, comida preparada y comida chatarra (del 17% al 26%). No se observan grandes diferencias de reducción y aumento en el caso de los desempleados.
La encuesta también discrimina los datos en función de las áreas geográficas. En Europa hay un menor porcentaje (7%-8%) de consumidores de comida preparada, dulces y comida rápida. En América la tendencia es a la baja. Un mayor porcentaje de personas afirma que redujo el consumo de productos menos sanos.
Finalmente, en África y la región Asia-Pacífico la cifras se equiparan. Entre el 20% y 25% asegura que su consumo de comida poco saludable disminuyó; frente a un 25% y un 33% que señala que aumentaron este hábito. Mientras tanto, en la región Mena (Oriente Medio y África del norte) la alimentación a base de comida preparada, dulce y comida rápida se ha elevado entre 15% y 18%.
La encuesta se realizó en línea en España a 1.017 personas en el mes de noviembre. En términos globales, se recopilaron datos de 29.575 personas con el objetivo de indagar sobre las creencias en salud, hábitos de vida y consumo de alimentos.
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