Por Cambio16
01/02/2017
La Policía Nacional, junto con la Agencia Tributaria, han desmantelado diez plantaciones de marihuana y han aprehendido 1.642 plantas a punto de ser cosechadas y distribuidas en el sur de Francia y Cataluña. En todas las plantaciones se sustraía el suministro eléctrico de la red general. Y el consumo de los equipos de refrigeración e iluminación de estas plantaciones de interior que en Sant Miquel de Fluvià (Girona) eran habituales los cortes de luz.
La operación, denominada Banyo, por la que han sido detenidas diez personas, se inició hace un año y ha contado en su fase final con dos importantes operativos. El primero se realizó el 18 de enero en varias localidades cercanas a Figueres, realizando ocho registros en domicilios y almacenes con la detención de tres personas que se encargaban del mantenimiento de las plantaciones. Al día siguiente fue detenido el responsable de la organización.
En el segundo operativo se han realizado seis registros en la localidad de Sant Miquel de Fluvià, Girona, donde se localizaba la mayor parte de las plantaciones controladas por una misma familia. Allí han sido detenidas cuatro personas. Este grupo estaba adquiriendo casas unifamiliares, en un radio de 300 metros de la vivienda donde residían, para tenerlas todas controladas.
Estas casas estaban protegidas en algunos casos con “guardadores” y en otras con perros, que tuvieron que ser inmovilizados durante la intervención policial dada su peligrosidad. El grupo familiar ejercía fuertes medidas de presión sobre los habitantes de la población para evitar que declarasen en su contra.
Además, se han intervenido 8.200 euros procedentes de la venta de marihuana, así como una pistola y dos revólveres que los miembros de la organización escondían en los domicilios para defenderse de los posibles robos que son habituales entre organizaciones.
En el operativo final han intervenido unidades de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria en Cataluña, Navarra y Aragón, de la Brigada Provincial de Policía Judicial, Grupo Crimen Organizado, de la Policía Judicial de Lloret de Mar y Figueres y de las Unidades de Intervención Policial U.I.P, sumando un total de 50 efectivos.
Todos los detenidos han pasado a disposición judicial y han sido imputados por delitos de tráfico de drogas, organización criminal, tenencia ilícita de armas y sustracción del fluido eléctrico.