Aunque fue en 2014 cuando Naciones Unidas reconoció en el Yoga beneficios para la salud física, mental y espiritual y proclamó el 21 de junio como su día internacional, la civilización occidental llevaba décadas conectada con esa antigua tradición de la India. Charlas, encuentros y prácticas procuraron ese acercamiento gradual, firme e indetenible. Sin dudas, la figura de Sadhguru capitaliza millones de seguidores en todo el mundo y pone el yoga al acceso de todos.
Desde joven Sadhguru sintió la necesidad de indagar, estudiar y profundizar en ese conocimiento ancestral. Hace más de cuarenta años inició, montado en su pequeña motocicleta, la gran aventura de llevar sus enseñanzas a pueblos y ciudades de la India. Tal vez desconocía o, por el contrario, conocía bien el rumbo de sus palabras y el alcance de su voz. Años después, en 1992, creó la Fundación Isha. La plataforma para sus actividades espirituales, educacionales y medioambientales.
Su trabajo de divulgación traspasó las fronteras y en la actualidad Sadhguru es el líder espiritual más célebre de la India. Conferencista y autor, ha llevado la palabra, la meditación y ejemplo de vida a los cinco continentes Sus títulos están en la lista de libros más vendidos de The New York Times. Tiene más de 20 millones de seguidores en sus redes sociales y es un gran impulsor del gran movimiento global del yoga.
Son muchas las definiciones y prácticas del yoga. Su texto originario se remonta al año 400 d.C. y su práctica “consiste en alcanzar el equilibrio absoluto, la claridad penetrante y la exuberancia inagotable, con lo cual estás inmensamente preparado para la vida”.
Día Internacional Yoga, una década después
La Asamblea General de la ONU aprobó por aclamación el Día Internacional del Yoga, con el aval de 175 Estados miembros y por solicitud del gobierno de la Indio. Su primer ministro, Narendra Modi, expuso las bondades del yoga y sus efectos positivos en las personas y la sociedad en general. «Su enfoque holístico es valioso para nuestra salud y bienestar. El yoga no es solo de ejercicios, sino una manera de descubrir el sentido de identidad de uno mismo, el mundo y la naturaleza”, dijo.
Entonces, 192 países celebraron la ocasión y la India logró un doble Récord Guinness en Rajpath: más de 35.000 personas de 84 nacionalidades hicieron yoga en un solo evento.
Sadhguru considera que la acogida del yoga de una “manera maravillosa y expansiva” es el resultado del esfuerzo de sus seguidores. “Más 35.600 profesores en 100.000 lugares de todo el mundo, incluso a bordo de vuelos, impartieron clases de Upa-Yoga (una corriente más física que espiritual) para cientos de miles de personas”, dijo.
Mientras tanto, los voluntarios trabajaron día y noche para crear expectación en línea. La campaña de Isha en las redes sociales llegó el primer año de celebración del Día Internacional del Yoga a unos 12 millones de personas. El vídeo de Namaskar se volvió viral con más de 2,5 millones de visitas y la aplicación móvil «Yoga Tools» ha hecho que la práctica de Upa-Yoga esté disponible para muchos más.
Más que retorcer el cuerpo y contener la respiración
El yoga está presente en hogares, comunidades, centros de meditación, escuelas, espacios de recogimiento, en lugares abiertos y naturales o en grandes explanadas citadinas como Nueva York o Londres. Yoga Alliance estima que más de 300 millones de personas practican yoga en el mundo. Un aumento significativo. Hace apenas unas décadas el yoga se practicaba principalmente en la India y algunas otras partes de Asia.
Sadhguru afirma que el yoga explora la mecánica misma de la vida. Anterior a toda religión, abre la posibilidad de formar un ser humano más allá de las limitaciones impuestas por la naturaleza, si está dispuesto a esforzarse. Es la ciencia del desarrollo interior, el bienestar y la liberación. «El mayor regalo para las generaciones futuras”, asienta.
La palabra «yoga» significa literalmente unión. No retorcer el cuerpo ni atar los miembros, contener la respiración o hacer cualquier otro malabarismo. «Yoga» significa que, en la propia experiencia, todo se ha convertido en uno mismo. Su aplicación eleva la capacidad de percibir y que cada individuo reconozca y entienda su naturaleza última. «El yoga es la exploración más profunda de la mecánica misma de la vida», señala.
Cambio en la forma de percibir la vida y el planeta
El yoga, su práctica y conocimiento, tiene hoy más importancia que nunca antes. “Contamos con poderosas herramientas de ciencia y tecnología suficientes deshacer el mundo y acabar con la vida. Por tanto, es muy importante que tengamos conciencia de la vida y sintamos a todos los demás seres como parte de nosotros mismos, como en efecto lo es”, explicó
Sadhguru entiende que si un cierto porcentaje de la población mundial meditara, la calidad de la sociedad cambiaría. «Si los líderes del mundo experimentan el yoga de la vida, habría un cambio dramático en el planeta y se solucionarían todos los problemas de la humanidad. La vía es ampliar la percepción de la vida, pasar de la individualidad a la universalidad. Nuestro trabajo no terminará hasta que los 8.000 millones de habitantes del planeta prueben el yoga”, declaró.
Contó que el conocimiento del yoga fue transmitido hace miles de años por el primer yogui, Adiyogi. Un solsticio de verano, Adiyogi giró hacia el sur y fijó por primera vez sus ojos en los Saptarishis o Siete Sabios, sus primeros discípulos. Ellos comenzaron a divulgar la ciencia del yoga al mundo.»El 21 de junio, solsticio de verano, marca por aclamación de todos los Estados miembros de la ONU acontecimiento trascendental en la historia de la humanidad al celebrar el Día Internacional del Yoga», agregó.
Sadhguru insiste en que la única salida está dentro. No arriba ni fuera. Hay que mira dentro de uno mismo, que es lo que significa yoga, para realmente conocer el bienestar. El gran esfuerzo es llevar el proceso espiritual a los individuos que tienen una gran influencia sobre el resto de la población, a los líderes mundiales, que pasen de la geopolítica a la tecnología interior. «Es la única forma de que los seres humanos conozcan verdaderamente el bienestar, mirando dentro de sí mismos», insistió.
Ecología, naturaleza y conciencia
Sadhguru propone que a los jóvenes en un proceso de creación y formación se les enseñe a manejarse con un poco más de conciencia y de responsabilidad consigo mismo. «De lo contrario, la juventud puede ser muy compulsiva. Si son más conscientes, tendremos un gran futuro para la humanidad y para el medioambiente”, advierte.
La ecología y la conciencia humana no pueden separarse. «Mirar hacia dentro es siempre ver que eres parte natural de todo lo que te rodea. El problema es que vemos la vida en pedazos, no como totalidad. Ver la vida en parcelas nos vuelve insensible y por eso hablamos de salvar el mundo. Un idea tonta. Somos nosotros los que estamos protegidos por la Madre Tierra, no al revés. Nada de esto sería necesario si los seres humanos entendiéramos que, nos guste o no, estamos reverberando como parte de esta existencia”, concluyó.