POR ANA TRENDY
02/08/2017
Nada como viajar a la Riviera Francesa para poder vivir un verano maravilloso e inolvidable.
Paisajes de playas hermosas abundan en este destino de Europa.
.
Son lugares únicos donde el mar tiene otro significado.
Nuestra experiencia por la Riviera Francesa puede resumirse como una aventura maravillosa que hay que vivir.
Además de playas y pueblos inolvidables, hay muchos lugares por descubrir.
Los hoteles son magníficos, y no le bastará con una sola visita.
El hospedaje a lo largo de la Riviera Francesa sumerge al turista en un mundo sin igual.
Algunos son palacetes, ofrecen spas y su decoración es extraordinaria.
Famosos diseñadores de interiores han trabajado en ellos para hacerlos inimitables.
Mención aparte para su gastronomía.
Sus platos son elaborados y el sabor es exquisito.
La comida francesa lo hará querer conocer todos los restaurantes.
Tener una degustación increíble lo hará desear regresar una y otra vez.
Riviera Francesa
La famosa Costa Azul o Riviera Francesa es única.
Aristócratas y nobles se pasean por ella en esta época del año.
La moda veraniega de la mujer parisina se impone.
.
Y su tendencia puede verse en cada calle, yate o restaurante.
La Riviera Francesa es todo un derroche de lujo turístico.
.
Por ello, le recomendamos visitarla y no olvidar las sugerencias que aquí incluimos, luego de nuestro periplo por esta franja del Mediterráneo.
Saint Tropez
En Saint Tropez el verano es fascinante.
.
Por ese rincón del Mediterráneo lujosos yates hacen su parada en verano.
La mujer parisina que hace vida en la Costa Azul marca tendencia.
El paisaje de Saint Tropez esta dominado por una fortaleza del siglo XVI.
En su puerto se siente la vida con sus elegantes turistas en cafes, bares, restaurantes y terrazas.
Por sus playas de arena blanca y mar, toman el sol los visitantes mas chic.
En ese pueblo, lleno de mansiones y palacetes hay muchos sitios de interés.
.
Recomendamos visitar la Iglesia de Saint-Tropez y la Capilla de Sainte-Anne.
No olvide pasar por la fábrica de torpedos.
Dese un paseo por el lavadero Vasserot y su fuente.
Visite la Maison du Maure (la casa del Moro).
Camine por la escalinata del corsario.
Imperdibles son la Torre Jarlier, el Palacio y el parque de la Moutte.
Para los amantes del arte está el Museo de l’Annonciade, con pinturas de Signac, Seurat, Luce, Bonnard, Matisse, Braque y Derain.
Si desea tomarse unas copas vaya al pub irlandés del puerto, o a los bares junto a las carpas del Village.
También os sugerimos la zona de copas del Hotel Sube, la terraza del Sénéquier o a las exclusivas mesas de L’Escale.
La Château de la Messardière, La Résidence de la Pinède, el Hotel Byblos Saint-Tropez y el Hotel de Paris Saint-Tropez, son lo más in para hospedarse.
.
La Château de la Messardière es el lugar de referencia del lujo refinado en Saint Tropez.
Tiene vista hacia el golfo, los viñedos de Ramatuelle y las playas de Pampelonne.
La Résidence de la Pinède, cuenta con lujosas suites con vista al mar.
El Hotel Byblos Saint-Tropez, siempre está repleto de trotamundos importantes y fanáticos de la moda.
El Hotel de Paris Saint-Tropez y La Reserve Ramatuelle, son hotel y spa solo para privilegiados.
Comer con el aval de la guía Michelín es lo más adecuado para los ilustres visitantes.
.
Saint Tropez cuenta con su propio plato: la tarta Tropézienne, una de las especialidades de la ciudad.
Sugerimos La Vague d’Or, con tres estrellas y La Voile, con una.
.
Dese un gusto en el restaurante Auberge des Maures, donde asistían Charles Chaplin y David Niven
Niza
Niza es la capital de la Costa Azul y el principal balneario de la Riviera Francesa.
Es un paraíso exclusivo para comer y comprar.
Los turistas disfrutan sus playas de guijarros y pasean a pie o en bicicleta.
Las noches son llenas de vida con sus discotecas, bares y clubes.
Entre sus lugares encantadores, está el arenal de playa Paloma y el mercado Cours Saleya.
.
Pero hay que visitar el casco antiguo de la ciudad y la Colline de Château.
Los turistas disfrutan del paseo de Los Ingleses.
Debe ir a la Catedral de San Nicolás (iglesia ortodoxa rusa, propiedad del Kremlin).
Otros lugares importantes son el Museo Matisse y el de Marc Chagall.
Y si os gusta el arte, id a la Ópera de Niza.
Para hospedarse recomendamos el Hyatt Regency Nice Palais de la Méditerranée.
.
Queda justo en el famoso Paseo de Los Ingleses y frente al mar.
También son top el Grand-Hotel Du Cap-Ferrat y La Réserve de Beaulieu & Spa.
.
Ambos son auténticos palacios, ubicados entre Niza y Mónaco.
Sus restaurantes han sido galardonados con estrella Michelín.
Para comer, Chantecler (2 estrellas Michelin) y Le Restaurant des Rois (La Réserve de Beaulie & Spa).
Con una estrella el Alain Lorca y La Peschería.
.
Esta última es una trattoría chic y elegante.
L´Ane Rouge es una exquisitez con la cocina del chef Mich el Devillers.
Pero si quiere algo más informal, pásese por Hi! Beach.
Como dato, en Les Compagnons de la Grappe están los mejores vinos de la región.
Cannes
Cannes es otro pueblo famoso de la Riviera Francesa.
.
Fue un pueblito de pescadores y ahora una importante ciudad pesquera.
En ella se estableció el Festival de Cine de Cannes.
Este evento reúne cada mes de mayo, a celebridades, ricos y famosos.
En el paseo marítimo de La Croisette, bordeado de palmeras, hay hoteles de lujo, restaurantes y tiendas de diseñadores, como Gucci, Chanel y Dior.
En Cannes se pueden admirar restos romanos.
Visitar el castillo de la ciudad, que fue utilizado como prisión durante la Revolución Francesa.
También pasear por las calles estrechas y laberínticas de La Suquet.
Recomendamos ir al mercado Forville y al Musée de la Castre.
No deje de navegar hasta la isla de Santa Margarita, jamás lo olvidará.
.
Allí se hizo histórica la vida del hombre de la máscara de Hierro, que fue llevada al cine.
Para alojarse le recomendamos el Five Seas Hotel y el Hotel Barrière Le Majestic Cannes.
En el Intercontinental Carlton Cannes y el JW Marriott Cannes, encontrará hospedaje de alto nivel.
.
El Marriot es un hotel 5 estrellas con casino y galería comercial.
Una opción para los viajeros interesados en las compras, las tiendas de lujo y los restaurantes.
Para degustar su gastronomía vaya a la Fouquet’s Cannes by Pierre Gagnaire.
.
Según los inspectores de Michelín La Palme d’Or tiene platos impactantes y originales.
Mientras que también recomiendan comer en el restaurante Paloma.
Con 2 estrellas Michelín sugieren Vía Archange, Le Park 45 y Les Pécheurs.
Biarritz
Biarritz es única con sus seis kilómetros de playas de fina arena.
.
Sus restaurantes, balnearios elegantes y mansiones atraen a los mas exigentes a pasar allí el verano.
La práctica del surf es parte de su cultura.
Sus paisajes tienen acantilados y sus aguas son terapéuticas.
La talasoterapia con las propiedades curativas de sus aguas, atraen a famosos.
Playa Grande, Port Vieux, Côte des Basques, Marbella y Milady son sus playas mas famosas.
.
Entre sus sitios de interés destacan el Casino Municipal y el Puerto de los Pescadores.
Si va a Biarritz debe conocer La Rocher de la Vierge con su Puente Eiffel.
Este puente fue construido por el arquitecto Gustave Eiffel, el mismo de la Torre Eiffel de París.
Explore la Capilla Ortodoxa y la Imperial (de Napoleón Bonaparte y su esposa, la emperatriz Eugenia de Montijo).
.
No olvide pasar por el Museo del Mar Aquarium, el Puerto Viejo, el mercado Halles y el faro.
Para hospedarse por todo lo alto hay hoteles super elegantes.
.
El Hôtel du Palais,fue un palacio construido por la emperatriz Eugenia, ahora reconocido centro de fitness.
Vivirá una experiencia de lujo en el Beaumanoir Small Luxury Boutique Hotel y el Sofitel Biarritz Le Miramar Thalassa.
Para comer bien en L’Impertinent y L’Océan (con una estrella Michelín) y La Villa Eugénie.
Tómese un café en el mítico salón de té Miremont, al igual que la realeza europea.
Mónaco
Al final de la Riviera Francesa está el pequeño país de Mónaco.
Famoso por su principado, sus paisajes llenos de costosos yates, casinos y autos de lujo.
Los juegos de azar hacen de Mónaco un famoso destino turístico.
El Casino de Montecarlo sigue siendo el más atractivo.
Pero Mónaco tiene auténticos tesoros para descubrir, como el Palacio de los Grimaldi.
Un castillo lleno de jardines y terrazas, donde se puede ver el cambio de guardia.
.
Descubra la ópera, el Buddha Bar, la Catedral.
Vaya a los museos y conozca las obras que allí resguardan.
En Cannes hay que caminar por el casco antiguo y sus elegantes calles.
Vea en el puerto los espectaculares yates fondeados.
Pasee por las playas de Le Larvotto y Montecarlo, donde comenzó la leyenda del principado Grimaldi.
Explore el Cercie d´Or para disfrutar del lujo de diseñadores, joyeros y anticuarios.
Viva el deporte acuático en el Sporting Club y sea expectador en el circuito de Fórmula 1.
.
Hay muchas maneras de llegar a Mónaco.
La más recomendable es la de tomar en el aeropuerto de Niza el helicóptero.
En solo 6 ó 7 minutos aterrizará en la capital de la Costa Azul, a orillas del mar.
Si necesita alojarse, recomendamos l’Hôtel de París y el Hôtel Hermitage Monte-Carlo.
.
El Hermitage se encuentra en un palacio de Mónaco que ha sido declarado monumento histórico.
Un lujosa experiencia será dormir en el Hôtel Metropole Monte-Carlo , que alberga el Spa Metropole by Givenchy.
Para comer recomendamos Le Louis XV – Alain Ducasse à l’Hôtel de París, con tres estrellas Michelín, y el Vistamar, con una.
Asimismo, son excelentes La Table de Patrick Raingeard en el hotel Cap Estel y el Joël Robuchon Monte-Carlo.
La Riviera Francesa siempre tiene lugares por descubrir, visitadla.