Por Erika Hidalgo López
10/05/2018
La promesa del recién estrenado presidente de los costaricenses, Carlos Alvarado, de lograr la abolión del uso de combustibles fósiles y descarbonizar a Costa Rica de manera acelerada, parece una oferta viable. Más aún cuando se trata de una nación que tiene un gran trecho avanzado en materia de renovables.
El mandatario llegó a la Plaza de la Democracia en un bus impulsado por hidrógeno, a asumir la presidencia. El mandatario sabe que las cifras oficiales le dan un fuerte espaldarazo a su promesa. Una promesa que sin duda muy pocos países puede asumir anticipadamente a las metas del Acuerdo de París.
Pero para Alvarado parece una «tarea titánica y hermosa», eliminar los fósiles en la economía y dar paso exclusivo a las energías limpias. «La descarbonización es la gran tarea de nuestra generación y Costa Rica debe estar entre los primeros países del mundo que lo logra, si no el primero», reseñó El Mundo.
Alvarado sostiene que Costa Rica debe estar liderando los acuerdos y compromisos suscritos en París sobre el cambio climático. Destacó que la nación centroamericana se ha convertido en «el laboratorio mundial de descarbonización».
Descarbonizar a Costa Rica es viable cuando 99,6 por ciento ya es renovable
Datos oficiales refieren que Costa Rica cumplió en enero de 2018 más de 300 días generando y consumiendo solo renovables.
El Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) en un comunicado indicó que en esos 300 días no fue necesario activar las plantas termoeléctricas que emplean carburantes fósiles.
Para la ICE se trata de una marca histórica, precedida por dos eventos similares. En 2015 se llegó a 299 días y en 2016 se cubrieron hasta 271 días con el 100% de energía renovable. El nuevo récord de producción se alcanzó con 5 fuentes limpias que suplieron el 99,62 % de la demanda.
La hidroelectricidad en Costa Rica cubre 75,39 %, la geotermia 12,53%, las plantas eólicas 10,65%, la biomasa 0,73% y los paneles solares 0,01%. Por su parte, los combustibles fósiles se llevan solo 0,38 % de la torta global de oferta energética.
Otro elemento que ayuda a descarbonizar a Costa Rica es que la generación de energías renovables ha tenido un gran auge y un espaldarazo. Iniciativas provenientes del sector privado y gubernamental han dado cuerpo a las soluciones ecológicas.
Costa Rica se ha convertido en un paradigma de desarrollo de fuentes alternativas. Toda vez que se trata de un país con tan solo 4,7 millones de habitantes. Donde la demanda energética gira en 1.600 megavatios, y posee una capacidad instalada unos 3.100 megavatios.
Para más información visite: Energía16