Aunque las autoridades del principado aseguran una erradicación de su uso, la Coordinadora Ecologista de Asturias denuncia que los Ayuntamientos de Villaviciosa, Sariego y Siero volvieron a aplicar herbicidas en la autovía del Cantábrico A-64 con el consecuente impacto ambiental y de salud.
El uso de herbicidas en las carreteras está prohibido en la red autonómica de Asturias desde 2008. Y prácticamente erradicado en Europa. Implica numerosos riesgos por la toxicidad de estos productos con el medio ambiente y la salud de las personas.
“Hemos denunciado ante los Ayuntamientos de Villaviciosa, Sariego, Siero el uso de herbicidas en la Autovía del Cantábrico A-64. Concretamente en varias decenas de kilómetros de los arcenes y la mediana de la carretera. A la afectación por su toxicidad se unen las precipitaciones del momento, como un elemento de mayor propagación”, señalan los ecologistas.
A los pesticidas aplicados en carreteras los arrastra el agua de lluvia. Y a través de las cunetas desaguan directamente a los ríos, con el consiguiente perjuicio para la fauna piscícola.
Asimismo, sostiene la Coordinadora, que “es más grave en el tramo de Villaviciosa porque acaba en la Reserva natural de la ría”.
Estos productos, tienen efectos altamente tóxicos para animales y humanos. Los estudios han revelado efectos adversos: toxicidad subaguda y crónica, daños genéticos, trastornos reproductivos, así como aumento de la frecuencia de anomalías espermáticas y carcinogénesis.
Peligro: Uso de herbicidas en Asturias
La agrupación advierte que la supuesta justificación para estas fumigaciones es eliminar hierba para favorecer la visibilidad de las carreteras y reducir los riesgos de incendio.
“Argumentos tan inútiles como falsos”, precisan, “pues se ha fumigado de forma indiscriminada todo el tramo con varias pasadas. El secar la hierba no reduce el peligro de incendios. Sencillamente lo adelanta y además expone los taludes a futuros argayos por la falta de protección vegetal ante las lluvias”.
La aplicación de estos herbicidas en tramos de las autovías de Asturias tiene “consecuencias nefastas”, insiste la Coordinadora. ¨No sólo se consigue secar la hierba, sino que se afecta a los numerosos pies de arbustos que existen en los márgenes de nuestras carreteras. Dejando un producto tóxico esparcido por todas las cunetas. Tanto la fauna silvestre como el ganado siguen pastando en estas zonas, por lo que se verán afectados por este herbicida tóxico”.
En ese sentido, solicitaron a los ayuntamientos que volvieron a aplicar esas sustancias, varias acciones. Entre ellas, que se prohíban las fumigaciones de las cunetas con herbicidas. Y que sólo se elimine de forma mecánica aquella hierba que pueda afectar a la seguridad vial o como medida de prevención de incendios.
Asimismo, que informen qué productos usaron. Y si se avisó en tiempo y forma a todos los centenares de propietarios de las parcelas colindantes de la autopista. Además, que se advierta del peligro que supone el consumo de productos agroalimentarios de la zona afectados por estos herbicidas.
Otros casos en el principado
El principado de Asturias reitera que el uso de estos herbicidas está erradicado. Sin embargo sigue siendo un recurso más o menos habitual por parte de empresas privadas. E incluso algunos ayuntamientos y entidades a la hora de realizar el mantenimiento y desbroce de zonas verdes, debido a su rápida acción y bajos costes.
La Coordinadora Ecologista denunció a mediados de 2020, otras aplicaciones. Instó al Ayuntamiento de Soto del Barco y a la Confederación Hidrográfica del Cantábrico a que se investigue el riesgo que supone haber utilizado herbicida, posiblemente glifosato.
En el entorno de la captación de agua del pueblo de Calgüetos, ubicado en el Cascayo y en gran parte de la orilla del cauce del reguero la Pedregosa. «Con el riesgo que supone estos productos tóxicos para las aguas de abastecimiento de los vecinos y para la biodiversidad del cauce”, asentaron los ecologistas.
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