Pacto Mundial / Red Española
La Responsabilidad Social Empresarial, también conocida como Responsabilidad Social Corporativa, ha sido un concepto central en el mundo empresarial durante décadas. Sin embargo, la evolución del contexto global y las reflexiones sobre en qué posición se encuentra la empresa en el tablero mundial exigen un enfoque renovado: el de la sostenibilidad empresarial.
Cuidar la sociedad, la economía y el planeta no es una cuestión de responsabilidad, sino de orientación, objetivo y fin para las empresas. La empresa que no entienda este precepto, no tendrá futuro. De hecho, según el estudio ODS, Año 8. Rentabilidad económica y Agenda 2030, las empresas que priorizan la sostenibilidad obtienen ventajas competitivas.
1. ¿Qué es la Responsabilidad Social Corporativa?
La Responsabilidad Social Corporativa o Responsabilidad Social Empresarial se refiere a las acciones voluntarias que las empresas llevan a cabo para gestionar sus impactos. Se basa en acciones destinadas, en su mayoría, a la mejora de la reputación de la empresa como iniciativas filantrópicas y actividades periféricas que no están en el centro empresarial. Son actividades que cumplen más las expectativas externas sin abordar las causas subyacentes de los problemas sociales, ambientales y económicos. Por ejemplo, algunas acciones como programas de voluntariado o donaciones a organizaciones benéficas.
Evolución de la RSE y catalizadores del cambio
La mayoría atribuye el término “Social Responsability of a Businessman” al economista estadounidense Howard Bowen. El término que se originó por la presión social sobre las empresas para que actuaran de manera ética y responsable. En España, se implementó a partir de los años noventa, pero tardó varios años en ganar popularidad. De hecho, en 2006, sólo un 14,8% de las empresas afirmaban emprender proyectos de responsabilidad social empresarial, centrados principalmente en medioambiente, formación y liderazgo femenino.
El panorama empezó a cambiar y para 2008 más de la mitad de las empresas ya conocían el concepto de responsabilidad social empresarial y comenzaban a integrar prácticas sostenibles en sus operaciones diarias. Sin embargo, los desafíos globales se intensificaron y las expectativas sobre la responsabilidad de las empresas aumentaron. No era suficiente “cumplir o explicar”, debían ser actores principales en la búsqueda de un planeta, una sociedad y una economía sostenible. La sostenibilidad dejó de ser un complemento y se convierte en parte integral de la estrategia empresarial.
Catalizadores del cambio
- Integración de la sostenibilidad en los procesos: no es un aspecto aislado y se integra en las operaciones empresariales.
- Identificación de las ventajas competitivas: reducción de costos, mejora de la reputación, atracción de inversores, apertura de mercados y llegada de clientes con valores sostenibles, entre otros
- Desarrollo de marcos fundamentales: el Acuerdo de Paris y la Agenda 2030 proporcionan una guía clara y objetivos específicos para el trabajo conjunto de todos los actores, incluidas las empresas.
2. Sostenibilidad empresarial: una respuesta necesaria
Conscientes del papel de las empresas en el logro de los desafíos de la Agenda 2030, la sostenibilidad empresarial o corporativa fue más allá de la responsabilidad social empresarial. Su enfoque no sólo se centra en el presente, sino que también se extiende hasta el futuro mediante las preservación y mejora de los recursos actuales. La clave es integrar los criterios ambientales, sociales y de gobernanza y los Diez Principios del Pacto Mundial de la ONU en el corazón de las estrategias y no quedarse en acciones aisladas. Es decir, convertirse en empresas sostenibles que trabajan por generar un impacto positivo en la sociedad y el planeta, sin olvidar la economía. Un valor principal de la sostenibilidad es que impacta positivamente en la rentabilidad de las empresas.
La sostenibilidad se basa en acciones como el desarrollo de productos sostenibles, la integración de la sociedad en procesos participativos o la transición justa de las cadenas de suministro, entre otros.
3. Diferencias entre responsabilidad social empresarial y sostenibilidad corporativa
La evolución de la responsabilidad social empresarial hacia la sostenibilidad empresarial refleja un cambio de mentalidad en los negocios que impulsa el Pacto Mundial de la ONU España y que resulta imprescindible para asegurar un futuro próspero y sostenible para la sociedad y el planeta.
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