El neerlandés Fabio Jakobsen, del Deceuninck-Quick Step, se llevó la cuarta etapa de La Vuelta 2019 en un final ajustadísimo, en el que dejó atrás por milímetros a Sam Bennett (Bora-Hansgrohe) y Max Walscheid (Team Sunweb), según el foto finish. En la general, por su parte, sigue comandando Nicholas Roche, seguido de Nairo Quintana a dos segundos y Rigoberto Urán a ocho.
🧐 ¡Un sprint más que ajustado! / Wow! That was close! 😯 #LaVuelta19
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La escapada de la jornada estuvo a cargo de Jelle Wallays (Lotto Soudal) y Jorge Cubero Gálvez (Burgos-BH), que se mantuvieron al frente por buena parte de la carrera. Las complicaciones surgieron en el pelotón, que seguía de cerca a los fugados, cuando Rigoberto Urán y Mitchell Docker, ambos del Education First, se cayeron a 51,7 kilómetros de la meta.
❤️ Clasificación tras la etapa 4 | GC after stage 4 #LaVuelta19
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Kruijswijk abandona
Por otro lado, Steven Kruijswijk, del Jumbo-Visma, tuvo que abandonar por sentir dolor en su rodilla tras la caída en la crono de Torrevieja. El holandés, que terminó el pasado Tour de Francia en el tercer puesto, era uno de los favoritos para ganar La Vuelta. “Por supuesto que estoy decepcionado por dejar la carrera, pero no hubo mejoría en mi rodilla”, explicó el corredor en su cuenta de Twitter.
Off course disappointed to stop the race, but after the TTT there was no improvement of the knee.
I say goodbye with a smile because I know @JumboVismaRoad will make this race worth it! Go for it boys! 👊🏻 https://t.co/UndaI7NGMS— Steven Kruijswijk (@s_kruijswijk) August 27, 2019
Hoy también hizo aparición la lluvia, justo cuando la fuga y el pelotón se acercaban al único puerto del recorrido, el Oronet, de tercera categoría. Primero coronaron Wallays y Cubero, seguidos por Madrazo, líder del pelotón. El asfalto mojado llenó de cautela al grupo pero, más pronto que tarde, el grupo comenzó a apretar para alcanzar a los escapados.
El primero en caer fue Cubero por problemas mecánicos y a 15 kilómetros de la meta, el pelotón terminó de neutralizar a Wallays. En este momento, Thomas de Gendt también sufrió complicaciones con un pinchazo, y tuvo que ser atendido por el coche de equipo. Los últimos kilómetros transcurrieron con tranquilidad hasta el sprint final, en el que Jakobsen dominaba y Bennett se coló en los últimos metros para darle más incertidumbre a la victoria de la cuarta etapa de La Vuelta.
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