Pese al levantamiento de la emergencia de salud pública a causa de la covid, a principios del mes de mayo, aún es imprescindible el uso de los tapabocas en espacios sociosanitarios. Y así seguirá siendo al menos hasta mediados de junio. Mientras que otros países europeos han levantado por completo el uso de mascarillas, en España la Comisión de Salud Pública aplazó la decisión hasta después de las elecciones del 28-M.
Mantener el uso de mascarillas en los centros sociosanitarios es una decisión polémica, algunos prefieren darle largas. Es el caso de Fernando Simón, director del CCAES, quien al ser consultado al respecto declaró que “estaría bien que las mascarillas sigan usándose en hospitales un tiempito más”. Sin embargo, algunas comunidades autónomas, entre las que se cuenta Madrid, con el apoyo por parte de la comunidad científica, piden la eliminación de las mascarillas. Alegan que no hay razones para creer que los beneficios del uso superen los posibles perjuicios que ocasionan.
Expertos a favor de levantar obligatoriedad de las mascarillas
Las farmacias y las instalaciones sociosanitarias y centros médicos son los únicos sitios donde se mantiene el uso obligatorio de tapabocas y mascarillas. En abril infectólogos y epidemiólogos de ocho instituciones señalaron que era hora de descartar la medida. El uso generalizado de mascarillas en los centros sanitarios fue necesario para reducir el riesgo de transmisión entre el personal sanitario, los pacientes y los visitantes. Pero ya se debe levantar la medida y poder respirar con tranquilidad.
Existen precedentes de la eliminación de las mascarillas. Es el caso de Portugal no se usa la mascarilla cuando se acude a la farmacia, hospitales, ambulatorios, dentistas y demás servicios médico-sanitarios.
Los especialistas consideraron que el coronavirus debe ser gestionado como otros virus respiratorios endémicos, que conlleva la aplicación correcta y coherente de las precauciones estándar y las basadas en la transmisión, como el uso de mascarillas y protección ocular por el personal sanitario cuando realice actividades con riesgos de salpicaduras o aerosoles en la cara, independientemente de los síntomas del paciente. Además del enmascaramiento de los pacientes cuando presenten síntomas.
Asimismo, los expertos recomiendan que para la fase endémica se replanteen otras estrategias de la época pandémica. Es el caso de las pruebas asintomáticas y el rastreo de contactos.
La COVID-19 sigue siendo una amenaza
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, anunció a principios de mayo el fin de la emergencia internacional por la pandemia de COVID-19. Tras más de 3 años la enfermedad causó la muerte de unas 20 millones de personas.
El líder de la OMS alertó que el fin de la emergencia internacional «no significa que la COVID haya dejado de ser una amenaza». Señaló que aún mueren personas muere a causa de la enfermedad. «Son miles de personas las que siguen luchando por su vida en unidades de cuidados intensivos, mientras que otras sufren las secuelas del poscovid», dijo.