Por Cambio16
30/1/2018
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- El PIB creció un 3,2% en 2016 impulsado por las exportaciones y el consumo
- La economía española crece al 3,1%
- La desaceleración rebaja una décima el PIB
- Funcas sube la previsión del PIB a un 3,2%
- La desaceleración de la economía rebaja una décima el PIB
- La economía española comienza a dar señales de parón
- España, entre los países de la UE de menor peso del sector industrial en el PIB
- Banco de España avala previsión de crecimiento
El crecimiento de la economía española se desacelera y solo alcanza el 0,7%. Así lo ha confirmado el Instituto Nacional de Estadística (INE) en el avance de los datos del último trimestre del año. El crecimiento de la economía española se sitúa así en un 3,1% en 2017. Este dato supone dos décimas menos que en 2016. El parón se produce tras moderar su avance al 0,7% en el cuarto trimestre. Una décima menos que en el tercer trimestre, cuando creció al 0,8%. El avance de datos de la Contabilidad Nacional Trimestral publicado este martes no ha entrado en detallar estas cifras.
«El Producto Interior Bruto (PIB) generado por la economía española registra una variación del 0,7% en el cuarto trimestre de 2017 respecto al trimestre precedente, según la estimación avance del PIB trimestral. Esta tasa es una décima inferior a la registrada en el trimestre anterior», asegura el INE.
Crecimiento de la economía española
Esta tasa del 3,1% coincide con las estimaciones del Banco de España y con las previsiones oficiales del Gobierno. En todo caso, los datos son aún provisionales y se conocerán a nivel desagregado el próximo 1 de marzo. El último informe del Banco de España ya había rebajado la previsión de crecimiento por la crisis de Cataluña. El organismo rebajó una décima su previsión de crecimiento para 2018, hasta una tasa del 2,4%. Y para 2019, también ha recortado una décima su estimación de crecimiento, hasta el 2,1%. Además, el Banco de España incluye su perspectiva para 2020, que es un crecimiento también del 2,1%.
Así lo certifica el Banco de España en el informe Proyecciones macroeconómicas de la economía española (2017-2020). En este documento se achaca a “la evolución de la incertidumbre política en torno a Cataluña” la desaceleración del PIB. Y por lo que respecta “tanto a la magnitud que pueda llegar a alcanzar como a su prolongación en el tiempo”. Esto “condicionará parcialmente la evolución de la economía española a lo largo del período de previsión”, indica el organismo.
Cuatro años de crecimiento
El crecimiento del 0,7% registrado en el cuarto trimestre, inferior al 0,8% esperado por el Banco de España y otros organismos de previsiones, se ha desacelerado una décima respecto al experimentado en el tercer trimestre de 2017.
Pese a ello, con este avance trimestral del PIB se acumulan ya 17 trimestres consecutivos de alzas. Es decir, cuatros años consecutivos de crecimiento de la economía española. En el primer y tercer trimestre de 2017 la economía avanzó a un ritmo del 0,8%. Mientras que en el segundo trimestre lo hizo a un ritmo del 0,9%.
Por su parte, la tasa interanual del PIB se mantuvo en el 3,1% en el cuarto trimestre de 2017. Esta tasa ya acumula once trimestres consecutivos creciendo a tasas del 3% o superiores.
La demanda nacional tira del PIB
La demanda nacional tira del PIB. Así se desprende de los datos contenidos en el último informe trimestral sobre crecimiento de la economía española realizado por el Banco de España. La demanda nacional aportó 2,6 puntos al PIB en 2017. Por su parte, la demanda exterior contribuyó al PIB con medio punto.
Respecto al cuarto trimestre de 2017, el Banco de España estimaba en dicho informe que el crecimiento sería del 0,8%. Basaba sus previsiones en el fortalecimiento de los mercados de exportación. Este fortalecimiento habría contrarrestado los efectos adversos derivados del aumento de la incertidumbre. Sobre todo la generada por la situación política en Cataluña.
Incertidumbre política
Estos efectos adversos, según el supervisor, se habrían concentrado especialmente en esta comunidad autónoma. También lo adelanto en su día la agencia de calificación Moody,s. Desde el punto de vista de los componentes de demanda, el impacto negativo de la incertidumbre se habría manifestado sobre todo en el gasto privado interno y en las exportaciones turísticas.
Tanto el consumo privado como la inversión en bienes de equipo habrían reducido sus ritmos de avance en los últimos meses de 2017, mientras que, por el contrario, se habría fortalecido la inversión en construcción.