Por Juan E. Ballesteros
23/3/2017
La tolerancia de los jóvenes europeos ante la venta de productos falsificados ha crecido desde el inicio de la crisis, así como la permisividad ante la descarga de contenidos ilegales de internet, incrementándose la confusión entre la piratería y la adquisición de productos audiovisuales a través de plataformas legales, según concluye una encuesta realizada por la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), que alerta de la permisividad ante estas violaciones de la propiedad intelectual.
Pese a ello, la mayoría de los encuestados (70%) afirma que nada puede justificar la compra de productos falsificados y un 78% sostiene que estas prácticas ilegales tienen un efecto negativo para las empresas y el empleo. Para la realización de este sondeo se llevaron a cabo 26.555 encuestas a ciudadanos mayores de 15 años a quiense se preguntó sobre su percepción de la propiedad intelectual. El informe es la continuación de un estudio iniciado en el año 2013 y tiene como objetivo valorar cómo ha evolucionado la población europeo ante este problema.
Un 15% de los jóvenes con edades comprendidas entre los 15 y los 24 años reconoce haber comprado de forma deliberada un producto falsificado en los últimos 12 meses, una cifra que supera en nueve puntos el registro del año 2013. En el contexto de la recesión y la crisis, el 41% de los jóvenes europeos considera aceptable la compra de falsificaciones, aunque la tercera parte de ellos dejaría de adquirir estos productos si existiera una alternativa legal a un precio asequible.
En cuanto a la piratería en medios digitales, el 83% de los encuestados prefiere asimismo acceder a contenidos digitales a través de plataformas legales o autorizadas siempre que exista una alternativa asequible. De los que admite utilizar fuentes ilegales, un 10% de los encuestados, el 71% dejaría de hacerlo si tuviese opciones más baratas. Las fuentes legales ofrecen más calidad para el 69% de los consumidores El 27% declara haber pagado por contenidos legales, siete puntos por encima del registro de 2013, cifra que se eleva un punto entre los jóvenes de 21-24 años (41%).
No obstante, la confusión sobre lo que constituye una fuente legal va en aumento. Un 24 % de los encuestados (cinco puntos porcentuales más que en 2013) duda de si una fuente en la red es legal, cifra que aumenta hasta el 41 % entre los jóvenes. Además, el 10 % de los encuestados manifiestan que al comprar productos habían sido engañados.
“En general, vemos que el apoyo a los derechos de propiedad intelectual entre los ciudadanos de la UE es alto. Pero también somos conscientes de que aún hay una labor por hacer para ayudar a los jóvenes, particularmente, a comprender la importancia de la propiedad intelectual para nuestra economía y nuestra sociedad. Especialmente en este momento en el que la política económica en toda la Unión Europea está cada vez más enfocada a fomentar la innovación y la creatividad”, según explica António Campinos, director ejecutivo de la EUIPO.