Por Cambio16
06/07/2017
El verano ha llegado y nuestras cabezas están pensando más en las vacaciones que en el trabajo diario. El calor y el cansancio que origina disminuyen la productividad hasta en un 20%, según últimos estudios. ¿Qué hacer entonces para no perder el ritmo de producción en esta época estival? El gestor de clientes SumaCRM, propone a las empresas siete consejos para que la productividad no caiga durante los meses de julio y agosto:
- Establece la jornada intensiva: es tipo de horario permite un menor desgaste físico y psicológico. Una jornada reducida permite dedicar el resto del día a actividades personales, familiares, de ocio, deportivas, etc. lo que facilita la desconexión y disminuye el estrés, gran enemigo de la productividad.
- Completa una tarea importante cada día a primera hora: una buena idea es poner acciones con metas para cumplir los objetivos. Al igual que tenemos planificadas las vacaciones y los días libres, es importante que a primera hora de la mañana y antes de revisar el correo o leer las noticias se complete la tarea más importante de la jornada. Una investigación muestra que el progreso genera más motivación que cualquier otra cosa.
- Adapta tu agenda al calendario estival: los meses de verano implican que las personas toman más tiempo libre y gestionan sus reuniones o llamadas en función a ello. Cuando necesites la ayuda o la implicación de alguien para avanzar en un proyecto o tarea, establece en tu organización uno o dos días de margen de respuesta para evitar la frustración por si esa persona no está disponible en esa fecha. Así evitarás quemar tus ganas de avanzar y tu motivación. Por otro lado, es importante comunicar los planes a los compañeros para que las tareas no se acumulen cuando llegue la hora de disfrutar del merecido descanso.
- Prioriza la lista de tareas y lucha contra la procastinación: Tim Pychyl, profesor de psicología y autor de ‘Solving the Procrastination Puzzle’, asegura que reconocer que «una tarea desagradable o difícil no se hará mágicamente más agradable mañana», lo que debería motivarnos a hacerlo ahora. Establece una lista de prioridades y recuerde que lo que ponga en la parte inferior es menos importante.
- Haz una lista con las tareas ‘robatiempo’: revisamos nuestro teléfono hasta 150 veces al día y miramos nuestro correo otro tanto. Eso implica mucho tiempo que desperdiciamos y no estamos trabajando. Por ello, es necesario que las incluyas en tu programación. Cuando actuamos de una forma más racional, podremos controlar la mayoría de los impulsos ahorrando tiempo.
- Aprovecha para organizar tu lugar de trabajo: la bajada de volumen de trabajo en verano es una oportunidad para clasificar los papeles que inundan el escritorio, la bandeja de entrada del correo y hasta los documentos que almacenamos en el servidor. Establecer un orden y trabajar de forma cómoda sin distracciones es posible creando un ambiente positivo.
- Haz planes en equipo: una caña o unas tapas el viernes puede ser exactamente lo que el equipo necesite para desconectar en estas fechas. Una cita informal como ésta, puede aportar una motivación extra para acabar la semana y afrontar la próxima con energía.