Por Cambio16
30/08/2017
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El Consejo de Seguridad de la ONU condenó hoy el lanzamiento de otro misil por parte de Corea del Norte este lunes, que sobrevoló territorio japonés, y exigió a ese el cese inmediato de esas acciones.
«El Consejo de Seguridad condena enérgicamente el misil balístico lanzado por la República Democrática Popular de Corea que sobrevoló Japón, así como múltiples otros misiles balísticos lanzados el 25 de agosto de 2017», señaló ese órgano en un documento.
Corea del Norte ha disparado la madrugada de este martes un misil balístico. Fuentes militares surcoreanas, citadas por Yonhap, han confirmado que el misil norcoreano pasó por el espacio aéreo japonés. Por su parte, el Gobierno de Japón ha indicado que el misil seguía una trayectoria dirigida al norte de su país.
Las fuentes militares de Yonhap han señalado que el misil balístico tuvo un alcance de unos 2.700 kilómetros y llegó a una altura máxima de 550 kilómetros.
Se reporta que el misil se dividió en tres partes y habría caído en el océano Pacífico, a unos 1.180 kilómetros al este de las costas de la isla nipona de Hokkaido, al norte de Japón.
Norcorea amenaza
Corea del Norte ha confirmado que el misil balístico lanzado este martes era un proyectil de alcance intermedio Hwasong 12, y que el ensayo contó con la presencia del líder de ese país Kim Jong-un, informa la agencia surcoreana Yonhap.
Además señala que Pionyang reconoce que el lanzamiento del misil se llevó a cabo como respuesta a los ejercicios militares conjuntos que las fuerzas de EEUU y Corea del Sur llevan a cabo en la península coreana.
Según la información disponible, Kim Jong-un ha destacado que el último ensayo fue el «preludio» del lanzamiento de misiles a la isla estadounidense de Guam, en el océano Pacífico.
La escalada de tensión entre Washington y Pionyang se intensificó a principios de agosto, cuando el presidente estadounidense Donald Trump aseguró que si Corea del Norte agravaba la amenaza nuclear, la respuesta de EEUU. sería «un fuego y una furia que el mundo nunca ha visto«. Ante este ultimátum, Pionyang respondió que elaboraría un plan para atacar con misiles la isla estadounidense de Guam.
Pero posteriormente, el Gobierno norcoreano desistió de su plan de atacar Guam, aunque indicó que podría cambiar de opinión en caso de que «los yanquis persistan con sus peligrosas acciones en la península coreana».