El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, logró que el Congreso aprobara la prórroga del estado de alarma. Aunque con menos apoyo. Pudo acumular el apoyo de Ciudadanos, el PNV, CC, Más País, Teruel Existe, NC y PRC para sumar 178 votos a favor, 75 en contra y 97 abstenciones.
Es la cuarta prórroga del estado de alarma. Sánchez lo considera como un instrumento imprescindible y sin alternativa para aplicar el plan de desescalada y vencer el coronavirus. Dirigiéndose a las formaciones políticas que no apoyaron la nueva extensión, dijo: «No hay aciertos absolutos, pero sí puede haber errores absolutos. Levantar el estado de alarma ahora sería un error absoluto”.
La única ideología tras el estado de alarma es proteger la salud pública, salvar vidas. Debemos elegir entre la unidad y el sálvese quien pueda. Pido a los grupos políticos que voten la renovación del estado de alarma. Es imprescindible para completar la victoria frente al virus. pic.twitter.com/iCMdWZpxzL
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) May 6, 2020
Sánchez argumenta que es necesario mantener el estado de alarma durante la desescalada y que la situación ha mejorado en la contención de la pandemia por las restricciones que impuso el gobierno: «El estado de alarma es la herramienta constitucional para luchar contra pandemias y emergencias sanitarias. Debemos limitar la propagación del virus. Necesitamos limitar unas semanas más los derechos de circulación y reunión para garantizar otros dos derechos: la salud y la vida».
Ante las acusaciones de la oposición de que el Gobierno ha aprovechado el estado de alarma para aprobar otras leyes, Sánchez resaltó que el único objetivo ha sido proteger la salud pública: «La única ideología tras el estado de alarma es proteger la salud pública, salvar vidas. Debemos elegir entre la unidad y el sálvese quien pueda. Pido a los grupos políticos que voten la renovación del estado de alarma. Es imprescindible para completar la victoria frente al virus».
Casado endurece la crítica
El líder del PP, Pablo Casado, endureció la crítica al Gobierno. Incluso tildó de pretensiones dictatoriales la extensión del estado de alarma.
“La situación de excepción no permite el establecimiento de una dictadura constitucional. Esto no lo digo yo, lo dice Manuel Aragón, que fue magistrado del Tribunal Constitucional a propuesta de su partido», dijo Casado en su intervención inicial refiriéndose a un artículo de Aragón publicado en el diario El País.
Casado también se refirió al acuerdo de última hora que el Gobierno pactó con Ciudadanos y lo calificó de «prebendas». Sin embargo, el líder popular anunció que su bancada no votaría en contra, sino que se abstendría.
Cuando votábamos a Sánchez sí al estado de alarma el PSOE nos calificaba de indignos, desleales e inútiles. Con la abstención, dice que somos la peor oposición de todo el continente. Cuando votemos que no dentro de 15 días, igual nos manda al General de la Guardia Civil. pic.twitter.com/ojSPAYPF5i
— Pablo Casado Blanco (@pablocasado_) May 6, 2020
Casado se dirigió a Sánchez: “Usted pretende trazar un relato al margen de la realidad para llegar a esa inquietante nueva normalidad que pretende vendernos. Lo hace mintiendo sobre las causas de la grave afectación del coronavirus en España. Lo hace también manipulando sus consecuencias económicas y sociales. Y lo hace malversando los instrumentos del sistema democrático para la gestión de esta crisis».
También le recriminó no reconocer ningún error en su gestión de la crisis: “Su retórica bélica parece cada vez más un chiste de Gila, que produciría hilaridad si no fuera por el drama que acompaña a su estrepitoso fracaso de gestión”.
Finalmente, Casado dejó claro que esta sería la última prórroga del estado de alarma que aceptará el Congreso: «No traiga otra prórroga dentro de quince días porque no la aprobaremos. Aproveche. Será la última votación que no va a ser negativa. Es usted el peor presidente en el peor momento, pero afortunadamente no le saldrá gratis”.
Ciudadanos vuelve al centro
La prórroga del estado de alarma ha salido adelante gracias a los acuerdos de última hora del Gobierno con Ciudadanos y el PNV. Los vascos siempre han tenido una relación fluida con el Ejecutivo, mientras que Ciudadanos vuelve a ser el partido de centro.
Después de ubicarse en el sector político del centro-derecha, ahora el partido naranja, bajo la dirección de Inés Arrimadas, vuelve a ser una formación liberal, de centro y moderada. Ciudadanos no ha abandonado la oposición, sino que desea ser el partido que rompa la bipolaridad izquierda y derecha.
‼️ ¡Hoy NO se votaba la investidura de Sánchez!
👉 Se decidía si se acababa el estado de alarma sin un Plan B.
📺 @InesArrimadas «Dimos un ‘sí’ condicionado a desvincular las ayudas del estado de alarma, preparar un plan B y más diálogo con la oposición» en @informativost5 pic.twitter.com/hITu7K7mGr— Ciudadanos 🇪🇸🇪🇺 (@CiudadanosCs) May 6, 2020
«Yo siempre voy a pensar en el interés general de los españoles. Y creo que muchos españoles, piensen lo que piensen, voten lo que voten, nos están mirando en el Congreso y no ven humildad, no ven rectificación, no ven manos tendidas, ven bronca. Es la oportunidad de decirle al mundo que España puede enderezar el rumbo», dijo Arrimadas en su intervención en el Congreso.
Luego del pleno, la líder de Ciudadanos explicó que la razón por la cual los 10 parlamentarios naranjas votaron a favor de la prórroga del estado de alarma: «No se votó la investidura de Sánchez. Se decidía si se acababa el estado de alarma sin un Plan B. Dimos un sí condicionado a desvincular las ayudas del estado de alarma, preparar un plan B y más diálogo con la oposición».
Sánchez airoso pero no fortalecido
Hasta el momento, Sánchez ha salido airoso de los plenos del Congreso. Se ha aprobado el estado de alarma cada vez que lo ha solicitado. Sin embargo, el presidente de Gobierno no está fortalecido. La crisis sanitaria lo ha dejado contra las cuerdas.
Sánchez ya no cuenta con el apoyo de ERC, su aliado en la investidura. Cada sector político tiene, al menos, una crítica al Gobierno y comienza a tensar la cuerda para sus intereses. Los independentistas catalanes exigen la reanudación de la mesa de diálogo, la autodeterminación y más autonomía para la Comunidad.
Vox le ha pedido la renuncia y el PP sigue tomando fuerza con los discursos agudos de Casado. Por el momento consiguió el apoyo transitorio de Ciudadanos, pero no le garantiza la gobernabilidad.
Adentro están las disputas con Podemos. En reiteradas ocasiones se han dejado ver las estalladuras dela coalición. Ahora, mientras España avanza hacia una «nueva normalidad», Sánchez camina sobre la cuerda floja.
Lee también:
Girauta se dio de baja de Ciudadanos