Al negociar con acciones es factible encontrar con ambos mercados, los cuales poseen características diferentes. En primera instancia, el mercado primario es el que estamos acostumbrados a ver en las principales ciudades. Es decir, la Bolsa de Nueva York, el Nasdaq, etc. Los principales lugares donde se hacen transacciones con acciones. Se considera primario porque es el que mueve más dinero y tiene mayor relevancia. Todo dueño de empresa podría dividir su empresa en varias acciones y venderlas a quien desee (siguiendo las reglas de su país), u ofertarla en uno de los mercados bursátiles donde se le permita entrar. Cuando en un mercado existe una o varias empresas que pueden vender sus acciones a particulares, se habla de un mercado secundario. En otras palabras, si una compañía decide ofrecer sus cuotas participativas por primera vez, pasaría al mercado primario, pero ya cuando un tercero quiera revender sus acciones, entraría dentro del mercado secundario. Los permisos para entrar en cada uno de estos mercados cambian, puesto que en cada región hay regulaciones distintas, especialmente en todo lo referente a empresas.
¿A qué hace referencia la regla del 72?
Esta regla se usa con frecuencia para tener un estimado de cuanto se puede ganar en el futuro. Si bien a ciencia cierta es imposible conocer ese dato con exactitud, sí se puede hacer aproximaciones. Se toma la rentabilidad de un año y se divide entre 72, lo que dé, equivale a los años que demoraría duplicar la rentabilidad. A ese monto hay que descontarle la inflación, que suele oscilar entre el 5 y el 10% en todo el mundo (exceptuando los países con hiperinflación). Hoy en día hay herramientas para hacer estos cálculos e invertir en fondos indexados. Vale decir que la regla del 72 da por sentado ciertas acciones, como que los ingresos serán reinvertidos al 100% después de conseguirlos. Aparte, es probable que una persona desee aún más exactitud con cada cálculo, para lo que le resultaría la regla del 69 o del 70, porque el resultado terminaría siendo más pequeño, incluso con decimales. Por cierto, la precisión se pierde un poco cuando la cifra es demasiado alta, así que si ese es el caso, hay que utilizar otras funciones de cálculo, como la de Capital Final, que se puede encontrar en este artículo.
¿Cuáles son las ventajas de invertir en acciones de la bolsa?Por una parte, el dinero invertido se diversifica y no se concentra en un solo activo. De forma práctica, si se compra una vivienda, todo lo gastado quedaría representado en ese inmueble, pero al comprar acciones, se obtiene una parte de muchas empresas. Las cuales podrían arrojar buenos resultados y revalorizarse solas. Mientras que la propiedad necesita de una inversión adicional para que recobre valor. También es posible segmentar las inversiones en el tiempo, en pro de prevenir que las crisis afecten. Siguiendo con el ejemplo de las propiedades, de poner fondos en una en un mal momento, pues se perdería mucho dinero. Aunado a ello, la liquidez es una característica fundamental del mercado de acciones, puesto que muchas veces la compra y venta es súper rápida, lo cual es una gran ventaja para las empresas y los individuos. Sin mencionar que en ocasiones no hay gastos asociados con el mantenimiento de una acción, a diferencia de lo que pasaría con una cuenta en un banco. Los costes suelen aparecer cuando se compre o venda una acción, si la plataforma lo decide así. Por último, el tiempo y el capital para empezar no son tanto como se cree, con invertir un poco de dinero y unos minutos al día es suficiente.
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