Por Cambio16
08/01/2017
Luego de pasadas las fiestas de fin de año, en las cuales muchos han sido regalados con nuevos dispositivos tecnológicos, la clave será incorporarlos a nuestras vidas, bajo ciertas reglas de uso que no nos quiten productividad.
Un reciente artículo de Financial Times, titulado How to have a productive new year, pone énfasis en la necesidad de controlar las distracciones digitales en 2017, para lo cual sugiere algunos tips que nos ayudará con esa difícil tarea.
Hay que conseguir estar desconectado. Una de las tareas básicas para trabajar en nuestra productividad en este año que recién comienza es estar convencidos que todo tiene su momento y que no podemos permitir que las redes sociales dominen nuestro tiempo, nuestra vida, y menos aún que perjudiquen nuestro trabajo. Esto significa que el Twitter o Facebook hay que dejarlo para tiempos muertos o si se quiere asignarle un momento en el día, que los correos electrónicos hay que segmentarlos entre urgentes/ importantes e intrascendentes. En función, de eso, dedicarles la atención correspondiente.
Si aprendemos a respetar esos tiempos y esos espacios, podremos enfocarnos en el trabajo que hacemos y hacer más cosas durante el día.
No hay que cargar el teléfono de aplicaciones. Una de las cosas que más ayuda a estar desconectados es no llenar nuestros Smartphones de aplicaciones de redes sociales y menos aún tenerlas abiertas permanentemente. Cuando eso ocurre, los niveles de adicción se incrementan. Esto significa que de ser posible abre todas tus cuentas en redes sociales desde tu computadora personal y nunca desde el teléfono.
Empezar muy temprano. Las personas que empiezan el día más temprano haciendo deporte suelen ser igual de metódicas para el manejo de las redes sociales porque saben la importancia de respetar un horario para el sueño e ir a la cama pronto para poder estar levantado muy temprano. Bajo esa misma lógica se cuestionan gastar mucho tiempo en las redes sociales porque este luego es escaso para todo lo que quieren hacer durante su jornada. Entonces, incluso prefieren una siesta de 15 o 30 minutos que repara el sueño de la noche anterior y eso obliga también a dejar de estar conectados durante ese tiempo.
Establecer metas. Cada día que llegamos a nuestra oficina nos debemos establecer metas sobre lo que queremos hacer durante la jornada con el fin cumplir con dichas tareas. No se trata de poner metas que no se pueden alcanzar sino ser realistas con estas.
Gestionar el tiempo. La mejor manera de medir el uso que le damos a nuestro tiempo es saber cómo lo estamos gastando. Si bien, como dice el artículo no se trata de tener un control absoluto sobre cada minuto, de lo que sí se trata es de reconocer que hay que saber priorizar en que se gasta este, en la medida que fuera de su uso es nuestras necesidades básicas, todo lo demás es negociable.
Motivación. La mejor motivación para tratar de ser más productivos tiene que ver con la forma en que sentimos que un mejor uso del tiempo nos ayuda en nuestro trabajo, en la familia, y en nuestra vida personal.
Suerte con esto.