Marco Postigo, subdirector comercial de compliance y productos de valor añadido de Informa D&B
Para la Unión Europea, la economía circular es un modelo de producción y consumo que implica compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar materiales y productos existentes todas las veces que sea posible para crear valor añadido, extendiendo así el ciclo de vida de los productos. Es decir, que los residuos se conviertan en recursos.
De acuerdo con el último informe del Observatorio Sectorial DBK de INFORMA, el volumen de residuos reciclados en España creció un 3% en 2023 hasta 21,1 millones de toneladas, tratados por las 350 empresas dedicadas a esta actividad.
Más de la mitad, un 60%, son residuos metálicos, mientras que el papel y cartón suponen la quinta parte del total reciclado. El resto se reparte entre madera, vidrio y plástico.
El aumento del volumen de residuos generados y el incremento de la proporción de materiales destinados a la reutilización ha favorecido la actividad del reciclado en los últimos tres años.
La sostenibilidad es una necesidad para las empresas. Las que asuman el buen desempeño ESG contarán con ventajas competitivas y serán resilientes
Dada la gran cantidad de residuos existentes, la legislación se dirige a evitar el desperdicio y alargar la vida de los productos para consumir de forma responsable, asegurando la viabilidad futura de todo el proceso y, en última instancia, del consumo humano.
Las compañías energéticas tienen un importante papel como suministradoras de la energía para el tejido empresarial. Las 250 principales empresas del sector facturaron más de 354.000 millones de euros, con una cifra de empleo global que ronda los 135.000 trabajadores.
Y, de acuerdo con el Observatorio Sectorial DBK, la potencia instalada de energía eólica y solar ha crecido más de un 60% en cuatro años, suponiendo cerca de la tercera parte de la producción total de energía eléctrica.
En España, como miembro de la Unión Europea, se están tomando medidas alineadas con el Pacto Verde y la Taxonomía Verde europea, que destaca la importancia del ESG y el compromiso con la sostenibilidad.
- El Pacto Verde europeo quiere transformar la economía europea en un modelo más ecológico y sostenible. Su objetivo es reducir las emisiones de carbono, promover la eficiencia energética, proteger la biodiversidad y fomentar la economía circular. Esto repercute directamente en las empresas, que deben tomar conciencia de estas medidas y adaptar su estructura y formas de trabajo para garantizar su cumplimiento.
- La Taxonomía Verde juega un papel muy importante en este sentido, ya que define criterios sobre qué actividades económicas son consideradas ambientalmente sostenibles. Esto ayuda a las empresas a identificar oportunidades de inversión alineadas con los objetivos de sostenibilidad y a evitar el greenwashing.
Para las empresas, especialmente para las de menor tamaño, que suponen la mayor parte del tejido empresarial de nuestro país, no es sencillo seguir el ritmo que marca este nuevo camino. El buen desempeño en ESG va más allá de la mera adopción de prácticas sostenibles: se ha de incorporar en el núcleo del negocio, en su propia estrategia, lo que supone dedicarle tiempo y recursos.
Pero, para aquellas que sean capaces de adaptarse, el esfuerzo tendrá su recompensa. Conseguirán mejorar su reputación con los beneficios que esto reporta, como una mayor capacidad de atraer clientes, también inversores y fuentes de financiación, además de talento para trabajar en su equipo, de donde no querrán marcharse. También partirán en mejor posición para hacer frente al cambio climático y a nuevos retos que van apareciendo. En definitiva, contarán con ventajas competitivas importantes y serán más resilientes ante las nuevas circunstancias que se puedan presentar.
Debido a la falta de transparencia, visibilidad y trazabilidad de la información disponible sobre estas materias, uno de los retos a la hora de implantar una estrategia ESG sólida es conseguir datos de calidad que la sustenten. Es importante verificar la credibilidad y coherencia de los datos que ofrecen clientes y proveedores.
Para intentar ayudar a las compañías en todos los ámbitos del ESG, desde INFORMA hemos lanzado ESG INTELLIGENCE, un conjunto de soluciones con información nacional e internacional que ofrecen:
- Indicadores de información no financiera disponibles en las memorias de las empresas españolas que lo hayan publicado, recopilados y tratados.
- Rankings ESG de más de 80 millones de empresas en todo el mundo, 2,1 de ellas españolas, gracias a que formamos parte de la red mundial de Dun & Bradstreet.
- Información adicional obtenida mediante la solicitud de autoevaluaciones ESG gratuitas a las empresas, que facilita un informe de rendimiento con sugerencias de mejora ESG para aquellas empresas que lo completen.
- Servicios de consultoría ESG a medida, gracias al acuerdo con una consultora especializada en esta materia.
El consumo de energía y la producción sostenible van a definir nuestro futuro y el de las generaciones venideras en el planeta, por lo que hacerlo de forma responsable y sostenible no es una opción, sino un deber ético. Las empresas son una parte vital en este proceso y aquellas que no interioricen esta nueva realidad corren el riesgo de quedarse obsoletas y no formar parte de este futuro.