Un superhéroe dijo en una ocasión que un gran poder conlleva una gran responsabilidad. En el caso de las universidades, el poder se plasma a través de la tradición educativa, la innovación docente, su capacidad para internacionalizarse a sí misma y a sus estudiantes, su presencia en ránkings internacionales, el número de convenios con empresas y otras universidades, y su apuesta decidida por el medio ambiente.
La responsabilidad se materializa en mantener una elevada tasa de empleabilidad, en tener una capacidad suficiente para otorgar becas, mostrar músculo para ampliar los acuerdos educativos con centros universitarios de todo el mundo y ser referencia en rankings internacionales que miden el desempeño formativo o de respeto por el medioambiente.
La importancia de la lucha contra el cambio climático nos compete a todos. Empresas, instituciones, gobiernos, ciudadanos… estamos intentando poner en marcha medidas para evitar una subida de las temperaturas que ponga en riesgo la sostenibilidad del planeta. En ese esfuerzo, las universidades tienen un papel básico en la educación dirigida a la sostenibilidad porque alumnos y alumnas serán quienes ostenten puestos de responsabilidad en el futuro y tengan capacidad para tomar decisiones que afecten a toda la sociedad.
Las universidades tienen un papel básico en la educación dirigida a la sostenibilidad. Sus egresados serán quienes ostenten puestos de responsabilidad en el futuro y tomarán decisiones que afecten a toda la sociedad.
Para que cale una educación que tenga en cuenta el cuidado del planeta hace falta que las propias entidades educativas tengan un compromiso férreo con el planeta. “Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), Agenda 2030 de las Naciones Unidas, requieren robustecer una ciudadanía consciente de su ecodependencia y comprometida con el bienestar y la calidad de vida. La educación para el desarrollo sostenible facilita esta medida”, asegura Mariano Ventosa vicerrector de Investigación e Internacionalización de la Universidad Pontificia Comillas.
Esta universidad es la cuarta en el mundo en el cumplimiento del ODS 7 (Energía asequible y no contaminante), la quinta en el ODS 13 (Acción por el clima), y la decimoquinta en el ODS 8 (Trabajo Decente y crecimiento económico), según el prestigioso ranking de Times Higher Education (THE), el único que mide el desempeño de las universidades respecto a los ODS.
Por eso es importante que la universidad sea consciente de su papel para el futuro del planeta y que la educación que imparta se adapte no solo a las necesidades del estudiante, sino también a las del entorno. Y en este sentido, Comillas es referencia nacional e internacional en sostenibilidad, una materia que es transversal en la universidad.
No en vano, no solo las cátedras de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería (Comillas ICAI) sobre energía abordan esos asuntos (Hidrógeno; Nuevas Tecnologías Energéticas; Industria Conectada; Energía y Pobreza, Transición Energética…), sino que también es un tema habitual en otras de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales (Comillas ICADE), como las de Impacto Social; Ética Económica y Empresarial, o Economía Sostenible.
Más del 95% de los graduados y posgraduados en la universidad pontificia comillas están ocupados a los seis meses de haber terminado sus estudios
El resultado es una educación transversal en todos los grados y postgrados de la universidad jesuita de Madrid, ya que los contenidos están actualizados de manera constante con los resultados de las investigaciones y trabajos de las cátedras, lo que permite una formación integral en la que se aplica la innovación educativa que lleva demostrando Comillas durante décadas.
Una innovación que pone al alumnado en el centro, como ya ha reconocido THE, que considera a Comillas como la universidad con un mayor compromiso con el alumno en Europa. Además, esa formación permite que más del 95% de los graduados y postgraduados en Comillas estén ocupados a los seis meses de concluir sus estudios: Comillas es la primera universidad en empleabilidad de España, la segunda de Europa y la séptima a nivel mundial.
GARANTÍA DE FUTURO
Esas cifras y ese reconocimiento en rankings permiten a la Universidad Pontificia Comillas ofrecer certezas en un mundo convulso lleno de incertidumbres. Y en un mundo que cambia, las aspiraciones de los estudiantes deben mantenerse intactas. Por eso es tan importante elegir no solo un posgrado que te garantice una proyección de futuro, sino la mejor universidad. ¿Cómo? Hay señales que te indicarán que tu opción es la adecuada y acertarás si eliges un centro con una tradición educativa sólida, que garantice un futuro de empleo, que dé oportunidades de enriquecer la formación con programas de internacionalización en universidades y escuelas de negocio de todo el mundo; que forme en habilidades como el liderazgo, la resolución de problemas, la capacidad de adaptación o el trabajo en equipo; que sea sostenible y tenga presencia en los rankings internacionales.
La Universidad Pontificia Comillas te ofrece un buen número de posibilidades de aumentar tu formación en un entorno internacional desde Madrid, una ciudad cosmopolita y conectada con todo el mundo. Tanto en el campo de los negocios, con programas como el MBA de Comillas ICADE, como desde la ingeniería, punta de lanza de la educación superior en España en temas energéticos y medioambientales, con másteres como Ingeniería para la Movilidad y Sostenibilidad; Transformación Digital de la Industria; Sector Eléctrico o Smart Grids. Desde el campo de la sanidad –como el Máster en Biomecánica y Fisioterapia–, como desde el de la cooperación, con el Máster en Cooperación Internacional al Desarrollo o el de Migraciones Internacionales.