Por Cambio16
30/01/2018
Los embalses que suministran agua a Ciudad del Cabo están a sólo 25 por ciento de su capacidad. Es el resultado de una severa sequía que amenaza con convertirla en la primera gran ciudad del mundo en quedar sin agua.
La ciudad sudafricana cuenta con 3.7 millones de habitantes. Ha crecido tanto que se les aconseja a los residentes que apaguen las válvulas de agua que alimentan sus inodoros. En consecuencia los habitantes llenan los tanques con agua jabonosa de su lavabo.
https://youtu.be/w4cRTQQC5iM
Helen Zille, alcaldesa de Ciudad del Cabo, reveló que se ducha solo cada tres días para hacer su parte, publicó un vídeo en Facebook, implorando que consuman solo 50 litros de agua dulce cada día. Es una quinta parte de lo que los habitantes de Ciudad del cabo suelen utilizar.
«A medida que grabo este mensaje, la proyección es que Ciudad del Cabo se quedará sin agua a principios de abril «, advirtió Zille en el vídeo.
La metrópoli sudafricana, por lo tanto, podría convertirse en la primera ciudad importante del planeta en quedarse sin agua. Pero puede no ser la última. El cambio climático está alterando los patrones de precipitación. Como resultado, las sequías son más frecuentes y más severas en muchos lugares, amenazando el suministro de agua de muchas de las ciudades del mundo en los próximos años.
Ciudad del Cabo, el estrés hídrico
La situación en Ciudad del Cabo es especialmente preocupante. La ciudad ha mantenido un sofisticado programa de gestión del agua durante las últimas décadas. Pero 2017 resultó ser el año más seco de su historia.
Las sequías no son novedad en la metrópoli sudafricana. En la década de 2000, ya hubo dos sequías importantes, una en 2004-2005, y la actual que comenzó en 2015 y continúa. El problema está en que ahora las brechas son mucho más cortas y la recuperación más lenta.
«Ciudad del Cabo es una ciudad relativamente rica en un país de ingresos medianos» , explican desde el programa global de agua de Nature Conservancy. «No hemos tenido muchos casos de ciudades de esa estatura que se estén quedando sin agua, como se prevé que Ciudad del Cabo lo haga en abril».
El programa explicó a Nature que lo que sucede es una confluencia de factores. Pero es un recordatorio de cuán vulnerables pueden ser las ciudades al fracaso en los sistemas y la gestión del agua. «Si la sequía golpea, muchas otras ciudades podrían encontrarse en una posición similar».
Planear para la sequía
El estrés hídrico no se limita a los países considerados «en vías de desarrollo». En Estados Unidos, California vivió la reciente y más severa sequía de los últimos años. Planear evitar una escasez de agua futura no es un asunto simple.
«Existe el riesgo de invertir demasiado en infraestructura» dicen desde Nature Conservancy. «Si la sequía no ocurre, gran parte de esa inversión se habrá desperdiciado». Pero, por el contrario, si una ciudad no invierte lo suficiente, podría quedar vulnerable a una crisis de agua.
En Ciudad del Cabo, los funcionarios locales se han quejado de que el gobierno nacional no construyó la infraestructura necesaria y proporcionó ayuda de emergencia para la sequía, según Los Angeles Times .
Finalmente en Ciudad del Cabo la crisis ya se acerca. Si los grifos de agua residenciales se secan en abril como se espera, los residentes irán a 200 puntos de distribución en toda la ciudad, donde se alinearán y presentarán cupones para recibir su asignación diaria de hasta 25 litros (6.5 galones) por persona, según el Daily Maverick , un sitio web de noticias de Sudáfrica. Antes de llenar sus envases, se les dará una dosis de desinfectante de manos para evitar la contaminación.