Por Benito Guerrero
22/08/2016
El avión es uno de los medios de transportes preferidos por los viajeros. Por ejemplo, en 2015 fueron exactamente 31,1 millones de usuarios los que decidieron usar el transporte aéreo. Muchos de ellos lo hicieron en clase turista, disfrutando de unas prestaciones inferiores a las de los pasajeros de primera clase. A continuación te damos las claves para intentar conseguir que tu billete en clase turista se convierta en un asiento de primera, es decir, un upgrade.
Estos trucos, que mezclan maña e ingenio, son un consejo de Fabio Passalacqua, director general en Reino Unido de Jetcost uno de los comparadores de precios más potentes de internet.
PRIMERO. Las agencias de viajes tienen en muchas ocasiones la posibilidad de conseguir un seguro de viaje gratuito, equipaje extra o el ahorro de comisiones al pagar con tarjeta de crédito. Por este motivo, no nos supone nada preguntar a nuestro agente por la posibilidad de mejorar nuestros billetes.
SEGUNDO. Causar una buena primera impresión puede ser muy útil en caso de que se hayan quedado plazas libres en primera clase y el personal de cabina opte por redistribuir a los pasajeros. Comienza por derrochar simpatía a la hora de hacer el check in, incluso si la espera en la puerta de embarque ha sido larga.
Otro de los elementos fundamentales es el vestuario: olvídate de sandalias, pantalones cortos, vaqueros o ropa deportiva. Muchas aerolíneas cuentan incluso con un código de vestimenta para viajar en business. Por último intenta parecer discreto, en caso de que te cambien a un lugar mejor, las azafatas te agradecerán que no se entere todo el avión.
TERCERO. Aunque podamos creer que es más sencillo conseguir un upgrade en un avión que va vacío, esto es completamente erróneo. Cuando la demanda en clase turista es superior a la de business, la compañía subirá de categoría a los primeros pasajeros de turista para dejar libres sus plazas. Así, conseguirán que los asientos con precios más bajos se queden libres y su venta sea más sencilla.
CUARTO. El «no» siempre lo tenemos asegurado. Por este motivo, no nos supondrá ningún esfuerzo preguntar al personal de vuelo si es posible conseguir un upgrade.
En muchas ocasiones las compañías venden más asientos en turista de los que disponen -el temido overbooking– y antes de despegar se ven en la necesidad de reubicar a los pasajeros en clases superiores para no dejar a nadie en tierra. De este modo, si hacemos saber que no nos importa que nos cambien de asiento, aumentaremos nuestras posibilidades.
QUINTO. En caso de que se produzca overbooking y no te importa viajar a otra hora no dudes en ofrecer tu asiento. Así conseguirás que te ubiquen en otro vuelo y la compañía mejore tus condiciones de viaje para agradecer tu amabilidad.
Ahora que conoces estos secretos tenlos en cuenta a la hora de planificar tu próximo viaje y, sobre todo, al llegar a la puerta de embarque. Si la suerte está de tu lado, conseguir el upgrade puede ser sencillo.
Advertimos de que son solo indicaciones y que en ningún caso suponen un cambio de billete automático al ir completando cada paso, pero por intentarlo que no quede.