POR NARKYS BLANCO
16/10/2017
.
La Junta de Castilla y León anunció esta semana que prevé recaudar en el 2018 hasta 10 millones de euros por el impuesto al impacto de los residuos radiactivos de carácter temporal, que anunció para afrontar el cierre de la central nuclear de Garoña, ya que el impacto ambiental de la planta es pagado a través de impuestos que de no pagarse acarrean sanciones.
La Junta de Castilla y León, según detalló el presidente de la comunidad, Juan Vicente Herrera, prevé contar con 74 millones recaudados por el conjunto de impuestos por daño medioambiental, que incluirían el dirigido a Garoña.
Garoña podría reactivarse
Tras presentar los Presupuestos, Herrera ha detallado que se deberá presentar un proyecto o una proposición de ley a lo largo de 2018 para “dar respaldo legal” a este impuesto. Lo que se recaude, esos 10 millones previstos inicialmente para el 2018, irán al plan de reactivación del entorno de la central burgalesa, ha comprometido Herrera.