Una semana después de comenzar su caminata desde el norte de Honduras con la esperanza de llegar a Estados Unidos, cientos de migrantes, sobre todo hondureños, iniciaron el largo viaje de regreso a casa, la mayoría con billetes gratuitos de autobús dados por las autoridades centroamericanas.
El presidente de Guatemala, Jimmy Morales, cifró el número de migrantes que retornaban a sus hogares en cerca de 2 mil hondureños. A esta cifra se le sumaban unos 486 que, como dijo el mandatario de ese país centroamericano, Juan Orlando Hernández, estaban en tránsito de regreso a Honduras, un viaje de aproximadamente 12 horas por carretera.
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«Estamos trabajando para dar un retorno pacífico y seguro. Hay que evitar que se sigan dando estas manifestaciones en un futuro«, dijo Morales, quien cifró en alrededor de 5,000 la cantidad de personas que se había reunido en la frontera para ingresar a México.
Asimismo, Hernández señaló que los migrantes de otras partes de Centroamérica se habían unido a la caravana junto con otros de «fuera de la región», aunque no citó nacionalidades específicas. Añadió que se usarían aviones para llevar a los niños de vuelta a sus hogares.
11:50 horas despegó una aeronave Let-410 de la ciudad de Retalhuleu en el occidente de Guatemala hacia la #BASEHAM TGU abordo vienen compatriotas que viajaban en la caravana hacia EE.UU. @FFAATV
@sedenah @HCHTelevDigital @JuanOrlandoH @anagarciacarias @COPECO_HONDURAS pic.twitter.com/nezKXUqy5B— Fuerza Aérea Hondureña (@AereaHn) October 21, 2018
El pasado viernes, después de enfrentamientos con la policía antidisturbios mexicana, unos 640 inmigrantes de la masiva caravana llegaron a México del otro lado de un puente sobre el río Suchiate, en Chiapas, para registrarse ante las autoridades de inmigración mexicanas.
«En el proceso de recepción de extranjeros de nacionalidad hondureña ubicados en el punto fronterizo del Suchiate, en Ciudad Hidalgo, Chiapas, se atendió a 640 migrantes que han presentado solicitud de refugio en nuestro país«, dijo un comunicado de la secretaría de Gobernación de México.
La #SRE, a través de la @EmbaMexGua, brinda atención a los integrantes de la #CaravanaMigrante. El Emb. Luis Manuel López participa en las acciones de protección de mujeres, niños y adultos mayores. Para el @gobmx la protección de los migrantes y de sus #DDHH es una prioridad. pic.twitter.com/TNQ6ITbzlO
— Relaciones Exteriores (@SRE_mx) October 20, 2018
En Honduras no hay trabajo, sí violencia
La mayoría de los inmigrantes con los que habló Reuters dijeron que su objetivo final era llegar a Estados Unidos. Algunos contaron que esperaban quedarse en México, pero que no tenían idea de cómo obtener los documentos necesarios.
«Lo intentaré de nuevo», dijo la hondureña Hilda Rosa, mientras agregaba que había salido de Honduras porque no hay trabajo y sí mucha violencia.
La llamada Caminata del Migrante partió hace más de una semana con unas 1.300 personas y en su avance hacia México con la perspectiva de llegar a Estados Unidos se le fueron agregando otros ciudadanos, con condiciones socioeconómicas también precarias.
Atención humanitaria, prioridad en la atención a migrantes. La @SRE_mx y la @SEGOB_mx informan que con respeto a los #DDHH, se ha mantenido atención a los casi 4,500 migrantes centroamericanos en el Puente Fronterizo entre México y Guatemala #Comunicado ✍🏻 https://t.co/3OGNnIkXaV pic.twitter.com/FBdCf5AGsG
— Relaciones Exteriores (@SRE_mx) October 21, 2018
José Ramón Rodríguez, un trabajador de la construcción de 45 años de la ciudad hondureña de El Progreso, se sentó en el extremo guatemalteco del puente la noche del viernes, con la cabeza baja, y su hijo de 9 años se acurrucó contra él. «Mañana nos vamos a casa», le dijo. Sus compañeros asintieron.
Algunos migrantes, entre ellos Adriana Consuelo, de 40 años, pasaron por debajo del puente y pagaron 25 pesos (1,30 dólares) para ser transportados por el río Suchiate en embarcaciones hechas de neumáticos de goma gigantes. Después de llegar a México, dijo: «Nadie revisó mis documentos».
Eunice Rendón, coordinadora del grupo de defensa de migrantes Agenda Migrante, contó que «cada vez que hay una caravana (de migrantes) se envía a la policía a la frontera sur (…) pero nunca hemos visto nada tan dramático como lo que vemos hoy«. Culpó al presidente de Estados Unidos como responsable de la gran movilización policíaca.
Amnistía Internacional elevó este domingo un llamado a que se respeten los derechos humanos de los que retornan a sus hogares y de los que permanecen en la frontera con México.
Total respaldo a las ONGs de DDHH de los migrantes, que como @cdhfrayba @CDHFrayMatias y todas las firmantes de acción urgente, son una luz para la #CaravanaMigrantes frente a los abusos de los gobiernos. @amnistiaonline les acompaña en solidaridad y acción en su valiente trabajo pic.twitter.com/hdrsQmcSzr
— Erika Guevara Rosas (@ErikaGuevaraR) October 21, 2018
La doble amenaza de Trump
Desde que se inició la caminata, el presidente de Estados Unidos tomó acción para evitar que llegaran a suelo estadounidense.
Primero amenazó a los gobiernos de Honduras, Guatemala y El Salvador de cortar toda la ayuda y asistencia económica si no detenía la caravana.
A raíz de estas declaraciones, la policía guatemalteca detuvo a Bartolo Fuentes, uno de sus líderes. El ministerio de Seguridad hondureño dijo que el arresto del activista se produjo porque “no cumplió con las normas de inmigración de Guatemala”.
La amenaza de Trump ocasionó reacción en los mandatarios centroamericanos. El presidente de Guatemala dijo públicamente que ninguna ayuda puede ser condicionada.
La siguiente reacción de Donald Trump fue contra el gobierno mexicano, a quien exhortó a evitar que los migrantes siguieran hacia Estados Unidos o enviaría al Ejército a la frontera sur de EEUU con México.
“Debo, en los términos más enérgicos, pedirle a México que detenga esta arremetida. Si no puede hacerlo llamaré al ejército estadounidense y cerraré nuestra frontera sur”, escribió el presidente Trump.
Las amenazas de Trump hicieron que organismos defensores de los derechos humanos criticaran su accionar . Amnistía Internacional afirmó que la caravana no es una amenaza para la seguridad sino un acto de supervivencia.
La Caravana no es una amenaza para la seguridad, es un acto de sobrevivencia de cientos de personas huyendo de extrema violencia, pobreza & exclusión y la incapacidad de sus gobiernos de respetar sus DDHH. Ante el drama humano, la respuesta debe ser de solidaridad y compasión ✊🏾 pic.twitter.com/NKAlh0NTwB
— Erika Guevara Rosas (@ErikaGuevaraR) October 19, 2018
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