Por Iñigo Aduriz
03/03/2018
Ni los ordenadores personales; ni las tabletas; ni los teléfonos móviles. El televisor sigue siendo el dispositivo preferido por los ciudadanos para entretenerse. Los españoles pasan, de media, cuatro horas delante de uno. Y, lejos de verse afectado; el sector se ha adaptado a la irrupción del entretenimiento a través de internet. De hecho; las ventas de Smart TV –televisiones con conexión a la red– ha aumentado un 56% en Europa en el último año; un factor asociado al imparable crecimiento del mercado de las plataformas de streaming o de vídeo bajo demanda como Netflix; HBO o Sky; así como el de las grandes plataformas de televisión de pago vinculadas ahora a las compañías telefónicas.
Si bien en España la mayoría de los ciudadanos –en torno a 6,8 millones de hogares– consumen televisión digital terrestre; en 2016 ya fueron 3,3 millones los hogares que vieron la televisión por internet. Así quedó reflejado en el estudio El desarrollo del mercado de la TV en 2016 elaborado por SES; que mostró además que quienes vieron la tele a través de la red en ese periodo fueron tres millones más que en 2012, año en el que se elaboró el estudio anterior.
Además; 1,2 millones de hogares fueron usuarios de televisión por satélite (200.000 más que en 2012); y 700.000 hogares vieron televisión por cable; 200 hogares más que en 2012. De ahí que las conclusiones del informe indicaran que el modo preferido de ver la televisión en los hogares españoles siga siendo la TDT (60%), aunque la difundida por internet ya ocupa el segundo lugar (22%), seguida de la televisión por satélite (10%) y la televisión por cable (8%).
Nuevo entretenimiento en el hogar
Los consumidores están descubriendo un nuevo mundo de entretenimiento en sus hogares; pero siguen haciéndolo gracias a las posibilidades de sus televisores, adaptados ahora a las tecnologías más punteras. Y esto explica que; a pesar del aumento de la movilidad; la televisión siga siendo el elemento central del entretenimiento con el cambio del mundo lineal al conectado. “La gente siempre ha disfrutado viendo la televisión y esto no cambiará de momento”, apuntaba el director de producto de Netflix, Greg Peters, en un encuentro sobre el futuro del sector organizado por la propia plataforma, que tuvo lugar en Berlín en diciembre y al que fue invitada Cambio16.
“La ventaja de los televisores conectados es que pueden explotar la mejor parte de la experiencia convencional de televisión lineal; al tiempo que aprovechan todos los beneficios de la tecnología online. Los consumidores ahora pueden disfrutar de la pantalla grande en el hogar, personalizada según sus gustos y preferencias; bajo demanda y de forma interactiva”; celebraba.
Netflix considera ya que “el futuro del entretenimiento se encuentra en el salón de casa” y por eso se ha volcado en la colaboración con empresas tecnológicas para contribuir a la evolución y mejora de los televisores para crear experiencias únicas.
Actualmente; los usuarios de la plataforma utilizan entre tres y cinco dispositivos diferentes conectados a internet para ver series o películas. Los aparatos conviven entre ellos y los consumidores acceden a sus programas preferidos desde aquellos que mejor se adapten a sus necesidades dependiendo de dónde se encuentren.
Pero; solo en España; las horas de consumo de Netflix a través del televisor han aumentado hasta un 60% en el último año. Los televisores inteligentes se han impuesto como los dispositivos más populares; seguidos de los de reproducción audiovisual –Apple TV, Rokus o Chromecasts– o las consolas de videojuegos.
El consumo según los dispositivos
Aunque la mayoría de los registros de nuevos miembros de la plataforma se realizan a través de dispositivos móviles y portátiles; dentro de los seis meses posteriores a la suscripción el dispositivo principal de visualización pasa a ser el televisor. Y el tiempo de conexión a través de estos aparatos es tres veces superior al de otros dispositivos; lo cual afianza la fidelidad de los consumidores y el interés de la empresa en contribuir a la investigación y desarrollo del sector.
Netflix trabaja con los laboratorios Dolby en la innovación de la visualización de contenidos a través de los televisores. Como explica Javier Foncillas, VP Commercial Partneships-Europe de Dolby, ambas compañías investigan “la ciencia de la visualización y el audio para crear experiencias espectaculares”.
El presente de la televisión está en las tecnologías HDR y 4K, que facilitan la nitidez y la calidad de la imagen, pero también en la tecnología Dolby Atmos, con sonido tridimensional. “El reto ahora es hacer accesibles todas esas mejoras al gran público”, apunta Foncillas. Por el momento, los consumidores ya pueden acceder a un entretenimiento de alta calidad sin la necesidad de contar con sistemas completos de cine en casa, sino gracias a barras de sonido o auriculares y la adaptación de cientos de contenidos a las últimas tecnologías.
Dónde está el éxito
El éxito de las plataformas de televisión en streaming o de vídeo bajo demanda reside; además; en el contenido personalizado. “Cada vez se llega a casa más tarde del trabajo y es necesario que la elección de las series o películas que nos gustan sea lo más fácil posible”, destaca Mike Hastings, Director of Enhanced Content de Netflix, compañía que lidera el mercado con más de 109 millones de suscriptores en más de 190 países.
La compañía dispone de 30 trabajadores que se dedican única y exclusivamente a categorizar sus contenidos y a clasificarlos en función del género cinematográfico pero también dividiéndolos en subcategorías y subtemas. Son los llamados taggers –creadores de tags–, cuyo trabajo está precisamente dedicado a facilitar a los usuarios el acceso únicamente a los contenidos que les interesan. Netflix emplea además una serie de algoritmos que permiten a los usuarios recibir recomendaciones en función de esos intereses.
La experiencia de ver la televisión
Todo está enfocado a mejorar la experiencia de ver la televisión; lo que ha suscitado no pocas críticas del sector cinematográfico, que acusa a las plataformas de vídeo bajo demanda de robarles nichos de mercado. Desde Netflix tratan de marcar distancias. “Queremos llevar el mejor contenido y de la mejor forma posible al salón de casa, donde es más fácil que más gente acceda a ello. Queremos una experiencia aún mejor que la del cine en el salón”; concluyen.