Andrés Tovar | Luis Roberto Martínez
09/03/2018
La innovación automotriz en el mundo inició desde la invención del motor de combustión interna. Los fabricantes crearon nuevos estilos de carrocería y segmentos de mercado. Se introdujeron las transmisiones automáticas y la dirección asistida. Asimismo, las características de seguridad como las bolsas de aire hicieron que los pasajeros fueran mucho más seguros. Incluso se agregaron computadoras a los automóviles para optimizar el rendimiento y proporcionar GPS para fines de navegación. En resumen, los vehículos se vuelven más baratos, más ligeros, más fuertes, más seguros, más limpios, más rápidos y más lujosos.
Pero, tras ese glorioso camino, la era dorada de la innovación automotriz se adapta a los nuevos tiempos. Y muestras como la del Salón de Ginebra 2018 nos dice que los mayores nuevos logros de la innovación automotriz apenas están por llegar. El futuro de la innovación automotriz dependerá de cuatro tecnologías principales: automatización, conectividad, energía eléctrica y economía compartida.
Los cuatro pilares de la nueva ola de la innovación automotriz
Automatización
Tal vez el cambio más obvio y fundamental que enfrenta el sector del automóvil es el aumento de los coches autónomos Esta tecnología no solo tiene implicaciones en los principales fabricantes y proveedores del sector automotriz, sino que también le dará a los automóviles la capacidad de autopropulsarse. Se espera que la economía del pasajero, que vendrá de aliviar a las personas del asiento del conductor, sea una industria de 7 billones de dólares sola para 2050.
Conectividad
Los autos nuevos ya están aprovechando una mayor conectividad hoy en día, y pronto será la norma incluso en vehículos de gama baja. Esta red agregada desbloquea nuevas funciones como información y entretenimiento, funciones de seguridad mejoradas y herramientas analíticas y de diagnóstico.
Eléctrica
En solo siete años desde su salida a bolsa, Tesla pudo superar a Ford en la valoración del mercado. Sin embargo, este es todavía el comienzo de la revolución EV. Muchos países han anunciado regulaciones para frenar los vehículos a gas o diesel, y se espera que los vehículos eléctricos lleguen a 41 millones de ventas globales para 2040.
Economía compartida
La economía compartida es el resultado de factores tecnológicos, pero también sociales. Sin embargo, cuando se combina con la automatización, el intercambio presenta un cambio fundamental en cómo funcionarán los desplazamientos y el transporte en el futuro.