Por Cambio16
28/06/2018
Los ciberataques en México encienden alertas de su organismo electoral, el INE, a pocas horas de sus elecciones generales. Primeramente, porque si bien los mexicanos emitirán su voto el 1 de julio mediante papeleta, se utilizarán sistemas electrónicos para contar y transmitir los resultados. Informes que autoridades electorales luego deben entregar a medios de comunicación. Pero además, los ciberataques en México contra instituciones financieras mexicanas -el país azteca es el más atacado informáticamente de la región y el quinto en todo el mundo- y los informes de presunta interferencia electoral en todo el mundo, alimentan las preocupaciones entre los analistas de que la elección presidencial del domingo en el país puede convertirse en un objetivo para los piratas informáticos.
«No descartamos ciberataques en México el 1 de julio» alertó José Roberto Ruiz, consejero electoral del INE. No obstante, el funcionario aseguró que este instituto cuenta con «32 sistemas cibernéticos, estrategias completas y planes de cobertura» para enfrentar un eventual ataque contra las elecciones. «El problema no es que existiesen, sino no tener la capacidad institucional de respuesta. Por ello nos hemos preparado más allá. Incluso conociendo precisamente lo sucedido en Estados Unidos».
Elecciones, caldo de cultivo de cibertaques en México
La tensión ya es alta en el país. Las encuestas muestran que es probable que los mexicanos elijan a un izquierdista por primera vez en casi cinco décadas. Ese candidato, Andrés Manuel López Obrador, ha acusado a sus rivales de fraude y colusión para evitar que gane en las últimas dos elecciones presidenciales. Mientras que sus oponentes dicen que su presidencia sería un desastre para la economía de México. Por ende, y cómo se vio en escenarios como EEUU, tal polarización es un terreno fértil para los ciberdelincuentes.
Una advertencia llegó en diciembre pasado. El ex asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, H.R. McMaster, dijo que había evidencia de interferencia rusa en la campaña de México. Aunque no entregó más detalles sobre cómo Rusia estaba tratando de influir en el proceso.
Precísamente Rusia fue mencionado nuevamente este mes cuando el equipo del candidato Ricardo Anaya informó que un sitio web que se había creado para publicar información cuestionando los vínculos entre López Obrador y un contratista, había sido desconectado por “un ataque”. El equipo de campaña de Anaya dijo que el ataque se había originado en Rusia. Los equipos de López Obrador, Anaya y José Antonio Meade no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Los cibertaques en México obligan a levantar un «mapa de ataque»
El ataque más probable en México involucraría múltiples solicitudes de información, conocidas como ataque distribuido de denegación de servicio, que abrumaría y bloquearía el sitio web del INE. Ese es el tipo de ataque que la campaña de Anaya dijo que sufrió durante el debate presidencial del 12 de junio.
Por consiguiente, el INE está trabajando para mitigar los riesgos. Jorge Torres, jefe de servicios de información del INE, precisó. “Tenemos personal con mucha experiencia en estos problemas y también tenemos auditorías de terceros”.
En la pared de su oficina en la sede del instituto en Ciudad de México, Torres tiene ocho pantallas que monitorean constantemente los sistemas de información del INE. Destaca además un «Mapa de ataque digital» que muestra ciberataques que se producen a diario en todo el mundo.
La única parte del sistema electoral conectada a internet es el sitio web principal del INE, que ni siquiera tendrá un recuento de votos, sino que proporcionará una lista de medios de comunicación que pueden proporcionar el recuento preliminar, dijo Torres. Otros sistemas de comunicaciones operan en una red interna y están protegidos, dijo.
El INE ha estado simulando ataques a sus sistemas para intentar detectar cualquier vulnerabilidad antes de la votación. El instituto también contrató a Scitum, una compañía propiedad del multimillonario Carlos Slim, quien controla la mayor compañía telefónica de México y la mayor parte de su infraestructura de telecomunicaciones, para verificar su trabajo.
“Siempre puede haber riesgos. Pero buscamos minimizarlos tanto como sea posible”, dijo Torres.