Por Cambio16
21/12/2017
China no enviará un equipo al Mundial de Rusia, para consternación de su creciente religiosa fanaticada.
Pero las empresas del gigante asiático no van a perderse el evento deportivo más popular del mundo.
China Mengniu Dairy, la segunda empresa láctea más grande del país, se convirtió en el último patrocinador de la Copa Mundial 2018.
Según el anuncio de la FIFA, la compañía será «el proveedor oficial de yogur y helados» para el torneo de junio.
Bajo el acuerdo de patrocinio, Mengniu también se ha ganado el derecho de transmitir un comercial de siete minutos durante cada uno de los 64 partidos de la Copa del Mundo en Rusia.
Mundial de Rusia… y de China
Mengniu se convierte en el cuarto patrocinador chino del Mundial de Rusia.
Las electrónicas chinas Hisense y Vivo son patrocinadores de segundo nivel para el evento de 2018.
Y la cabeza del patrocinio chino la tiene Wanda Group de nuestro conocido Wang Jianlin, accionista del Atlético de Madrid.
Wanda tiene un contrato como principal patrocinador para las próximas cuatro Copas Mundiales hasta 2030.
China, siempre en las oportunidades
Los patrocinios chinos llegan en un momento álgido para la FIFA.
Las marcas internacionales han estado reacias a gastar dinero en el torneo tras el escándalo de sobronos de 2015.
FIFA ofrece tres niveles de patrocinio para la Copa del Mundo: Partners (principal patrocinador) patrocinante oficial y regional.
En 2015, tres marcas occidentales-Castrol, Continental y Johnson & Johnson-optaron por no renovar sus acuerdos de patrocinio de segundo nivel tras el bautizado por los medios «Fifa-gate».
Pero las empresas chinas no parecen preocupadas por la «imagen escandalosa» de la FIFA.
El gigante del comercio electrónico Alibaba entregó a la organización su primer acuerdo de patrocinio después de las investigaciones.
La alianza de Alibaba con Fifa es de ocho años (2020), como patrocinante oficial de la Copa Mundial de Clubes.
Xi quiere gol en el campo
Los últimos acuerdos entre las firmas chinas y la FIFA son un reflejo de la importancia del fútbol en la China de Xi Jinping.
El mandatario chino se ha confesado un ávido fanático del deporte.
Fanatismo que se ha traducido en que los inversionistas chinos compraron clubes europeos de renombre mundial como el AC Milan de Italia
Asimismo, incorporaron jugadores de renombre a sus equipos con cheques astronómicos.
Esto último, criticado por otros equipos mundiales, quienes han denunciado la influencia china en las distorciones del mercado.
El equipo nacional de fútbol de China no clasificó para la Copa Mundial 2018, a pesar de tener a Marcello Lippi al frente.
Sin embargo, la FIFA confía que el gigante asiático alcance la Copa del Mundo de 2026.
Para esa justa, el organismo ampliará el número de equipos en el torneo de 32 a 48.
O bien, China podría simplemente organizar una Copa del Mundo, y ya está. Todos felices…