China es el país que más vigila a sus ciudadanos, según un informe de la empresa de ciberseguridad CompariTech. Por donde quiera que se miren las estadísticas, los ojos siempre se dirigen hacia el gigante asiático.
El Estado totalitario y la nación supervigilada, el Big Brother del que habló George Orwell en su novela 1984, escrita a mediados del siglo pasado, tiene en la actual China su más fiel representación.
Las cifras de CompariTech afirman que en el mundo hay 770 millones de cámaras en uso, de las cuales el 54% están en China. De las 20 ciudades más vigiladas del mundo, 18 están en China. Y de las 50 ciudades más vigiladas del mundo, 34 son chinas. Londres, en el Reino Unido, y Hyderabad, en la India, son las únicas que no están en China de las 20 ciudades más vigiladas del mundo.
“Las cámaras de vigilancia sirven para muchos propósitos, desde la prevención del delito hasta el monitoreo del tráfico”, dicen los autores del informe. Pero advierten que estos sistemas de vigilancia también podrían “pisotear los derechos a la privacidad y a la libertad de movimiento”.
Más allá del lado de la discusión en el que estemos, la realidad es que “la videovigilancia está aumentando en todo el mundo”, indican. De hecho, se espera que para 2021 se instalen más de mil millones de cámaras en todo el mundo, según el último informe de IHS Markit.
China, el Big Brother
De acuerdo con el texto de IHS Markit citado por CompariTech, el 54% de los 770 millones de cámaras de vigilancia del mundo están istaladas en China. Esto significa que hay aproximadamente 415,8 millones de cámaras en ese país.
Si este porcentaje se mantiene, el número de cámaras en China podría aumentar en 2021 a 540 millones. “Habría casi una cámara por cada dos personas”, dice CompariTech, tomando como base la población actual de ese país, estimada en 1.400 millones de personas. “Aunque esta proyección puede parecer vasta, puede estar a una fracción del número real”, dice.
China también usa “fervientemente” el sistema de reconocimiento facial, prosigue el informe. A menudo se usa para restringir la libertad de movimiento de las personas, al impedirles el acceso al transporte público. Las cámaras equipadas con esta tecnología se instalan en los centros de transporte público para hacer cumplir esta regla.
¿Vigilancia igual a seguridad?
Preservar la seguridad de las personas es el argumento más utilizado para justificar el uso de CCTV. Los avances de la era digital han permitido que estos equipos sean cada vez más sofisticados y económicos. Ciertamente, ya es muy frecuente ver cámaras de vigilancia instaladas en edificios o residencias particulares.
“La tecnología de reconocimiento facial –añade CompariTech– hace posible que tanto las entidades públicas como las privadas verifiquen instantáneamente la identidad de cualquier persona que pase por una cámara CCTV”.
Sin embargo, los resultados de esta investigación no mostraron una relación que confirme la relación entre vigilancia y mayor seguridad. Encontraron poca correlación entre la cantidad de cámaras CCTV públicas y el crimen o la seguridad. Por ejemplo, la ciudad de Taiyuan, en China, la primera en la lista con una prevalencia de 119,57 cámaras por cada 1.000 habitantes, tiene un índice de delincuencia de 51,47%. “En términos generales, más cámaras no necesariamente reducen las tasas de criminalidad”, precisa el documento.
Las cámaras de vigilancia en el mundo
El informe sobre el uso de circuitos cerrados de televisión para vigilancia incluyó las 150 ciudades más pobladas del mundo. Los investigadores de CompariTech utilizaron diferentes fuentes para recopilar los datos, incluidos informes gubernamentales, sitios web de la policía y artículos de noticias. Pero su enfoque se centró en las cámaras de CCTV público, como las usadas por cuerpos policiales.
Las cinco de las 20 ciudades más vigiladas son Taiyuan, China, con 465 255 cámaras para 3,891,127 habitantes, es decir, 119,57 cámaras por cada 1.000 personas. Luego siguen Wuxi, China, con 300.000 cámaras para 3,256,020 habitantes, (92,14 cámaras por 1.000 personas); Londres, Inglaterra, 627,727 cámaras para 9.304 016 habitantes (67,47 cámaras por 1.000 personas); Changsha, China, 260.000 cámaras para 4,577,723 habitantes (56,80 cámaras por 1.000 personas) y Pekín, China, con 1.150.000 cámaras para 20.462.610 habitantes (56,20 cámaras por 1.000 personas).
En el otro extremo, es decir, las que tienen menor cantidad de cámaras por cada mil habitantes, destacaron Manila, Filipinas (0,02); El Cairo, Egipto (0,04); Dhaka, Blangadesh (0,76); Osaka, Japón (0,11) y Sao Paulo, Brasil (0,22).
Entre las 20 ciudades más pobladas del mundo con sistemas de CCT público también figuraron, de América Latina, Ciudad de México, México con 87.000 cámaras para 21.782.378 de habitantes (3,99 cámaras por 1.000 personas); Buenos Aires, Argentina, con 15.700 cámaras para 15.153.729 de habitantes (1,04 cámaras por 1.000 personas); y Río de Janeiro, Brasil, con 14.000 cámaras para 13,458,075 habitantes (1.04 cámaras).
De Estados Unidos, la ciudad con más cámaras es Los Ángeles, con un total de 22.678 equipos para 4.015.940 de habitantes (5.65 cámaras por cada por 1.000 personas).
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