Cayetana Álvarez de Toledo envió una carta a Richard Ferrand, quien es el presidente de la Asamblea Nacional de la República de Francia. En ella reclama a ese organismo francés que rechace el reciente mitin de Carles Puigdemont en Perpiñán, localidad cercana al territorio español.
“Somos naciones de ciudadanos, no conglomerados de grupos étnicos o culturales”, son los valores a los que apela esta diputada española y dice que España y Francia comparten.
Valores europeos a la carta
La carta abre directamente con el señalamiento de Carles Puigdemont como prófugo de la justicia española, que se niega a rendir cuentas acerca de gravísimos crímenes contra la democracia en los tribunales. No solo la presencia de este señor constituyen un desafío a la democracia española y su Estado de Derecho, sino un desafío a la misma República de Francia. Según esta misiva, el saludo de Carles Puigdemont al entrar a Perpiñán fue: “Hemos entrado en Cataluña”.
La portavoz del grupo de los Populares apuntó a los valores profundamente europeos que unen a España y Francia que las hacen democracias modelos para el mundo. Carles Puigdemont, expresidente catalán, es prófugo de la justicia española desde 2017. Y lo que algunos califican como un multitudinario mitin en territorio francés; otros lo destruyen como un montaje del último “caudillo catalán”.
El fugado delirando, como buen ultranacionalista, con su Lebensraum en el departamento francés de Pirineos Orientales. Mención aparte merece su banalización del exilio, entre otros, de Tarradellas, que pasó 38 años exiliado de verdad en Francia. Puigdemont es una parodia andante. https://t.co/KYWOh75Awx
— Nacho Martín Blanco (@Nmartinblanco) February 28, 2020
Otras reacciones a la aparición de Carles Puigdemont
El hecho es que Cayetana Álvarez de Toledo no fue la única política en reaccionar ante este hecho. Otro diputado en el Parlament de Catalunya por Ciudadanos calificó a Carles Puigdemont de “parodia andante”. Carlos Carrizosa, presidente del grupo parlamentario de Ciudadanos, abogó para que la órdenes que emiten tribunales nacionales europeos se cumplan sin importar las particularidades de cada país.
En la carta de Cayetana Álvarez de Toledo se apela a los valores que comparten el Reino de España y la República de Francia, en cuanto a grandes valores de la civilización. Entiéndase: “la pasión por la libertad, la defensa de la igualdad, el compromiso con la fraternidad y la plena consciencia de que no hay democracia al margen de la ley”.
¿Para qué apela a esto la carta? Para solicitar “enérgicamente” a Richard Ferrand, impulse una declaración de la Asamblea Nacional de Francia que repudie la figura de Carles Puigdemont. Y bueno, quizás podría solicitar una extradición, ¿no es prófugo de la justicia desde 2017? O en todo caso, eso lo tendría que hacer el Gobierno. Pero restringiéndonos a la carta, hace un reclamo institucional a la nación francesa para que adquiera un determinada postura ante la presencia de un prófugo de la justicia española.
Para más información visita Cambio.16.com
Lea también:
Sánchez asume la mesa de diálogo como “una agenda de reencuentro»
Sánchez asume la mesa de diálogo como «una agenda de reencuentro»