Por Cambio16
6/12/2017
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Durante los últimos 5 años los espumosos de Aragón y Extremadura continuan produciendo ventas record. Se espera que el consumo en España mantenga la tendencia positiva y serán los productores aragoneses y extremeños los que experimenten crecimientos más importantes.
Según el Consejo Regulador del Cava, las ventas en el mercado interior aumentaron en el primer semestre del año hasta un 15%. Una buena cifra si se tiene en cuenta la trayectoria anterior del espumoso español.
El Consejo regulador es un organismo del ministerio de agricultura, alimentación y medio ambiente. Está integrado por viticultores, elaboradores y por representantes de las comunidades autónomas de la “región del cava”. Entre sus principales atribuciones se encarga de orientar, vigilar y controlar la producción, elaboración y calidad de los vinos amparados, velar por el prestigio de la denominacion de origen cava, perseguir su empleo indebido, promocionar la expansión de sus mercados y desarrollar funciones de defensa jurídico-institucional de la denominación.
Tanto los productores aragoneses como extremeños llevan varios años aumentando sus ventas en el mercado interior. El conflicto catalán les ha beneficiado, así como en el exterior, donde experimentan una importante internacionalización.
Cavas de Aragón
Representa la tercera comunidad española con mayor producción. Suma unas 650 hectáreas de uva donde trabajan unos 200 viticultores, con una producción de 600.000 botellas, las zonas productoras se localizan en Ainzón, Calatayud, Cariñena y Jarque.
Los productores aragonés prevén que sus ventas mantengan esta tendencia al alza. Los espumosos aragoneses están ganando cada vez más un mayor reconocimiento frente a los catalanes. Así lo confirma Meritxell Villas, directora de AragonMeGusta.com.
El sello de la Denominación certifica que estos espumosos se han elaborado de acuerdo al método tradicional, y que la segunda fermentación del vino base ha tenido lugar en la misma botella, con un tiempo de permanencia en las bodegas subterráneas de al menos nueve meses. Por último, las condiciones esenciales de los viñedos aragoneses, como son un clima más frío, se añaden al toque de los enólogos, para dar como resultado unos espumosos con matices peculiares, creando una personalidad propia.
Referencia de cata: color amarillo pajizo con tonos verdosos, brillante. Burbuja fina y continua. Franco en nariz con claros matices afrutados. Ligero y suave en boca, con un postgusto elegante.
La marca Reyes de Aragón de Bodegas Langa se ha consolidado entre los más reconocidos. También tiene la mejor puntuación en la cata ciega realizada cada año por la publicación especializada Wine Pleasures. En la última edición, ha sido aupado a la cima de los espumosos españoles. En concreto, el ‘Reyes de Aragón Gran Reserva’ ha sido distinguido con la Medalla de Oro en la categoría brut nature de larga crianza.
Esta distinción se añade a la ya larga lista de galardones cosechados desde hace años por Bodegas Langa, una de las firmas aragonesas pionera en su producción.
Cavas de Extremadura
En 1983, Aniceto Mesías descorchaba la primera botella de espumoso extremeño, pero no fue hasta 1987 que el Tribunal Supremo dictaminó que Almendralejo entrara en el mapa nacional. La Denominación de Origen ofrece anualmente un listado de las bodegas inscritas. En el último aparecen cuatro industrias extremeñas: Inviosa, Vía de la Plata, Romale y Marcelino Díaz.
La mejor manera de identificar al espumoso extremeño es buscando la referencia numérica de las etiquetas. Si es extremeño, debe comenzar por EX o por BA. Por contra, los espumosos envasados en Cataluña suelen llevar una B. 01.12.08
El espumoso extremeño se ubica especialmente en bodegas de la ciudad de Almendralejo, y cuenta con un gran reconocimiento en toda España, sobre todo en las comunidades de Madrid, Galicia y Euskadi.
Uno de los primeros en conseguir reconocimiento en el mercado han sido los cavas de Extremadura. Apoyados por una serie de iniciativas públicas crece de forma muy significativa. Superará este año otra vez los cinco millones de botellas. Desde 2012 cuenta con un mercado consolidado en España y que en competencia de precios, el consumidor nacional opta por un espumoso extremeño sobre el catalán.
En cuanto a la producción se refiere la tendencia se mantiene una vez más según Javier Mendoza, responsable de la web gastronómica TodoExtremadura.com. De hecho, en las bodegas Vía de la Plata este año han producido 800.000 botellas, 200.000 más que el pasado. Y es que, de acuerdo con sus cálculos, esperan llegar a vender un 18% más que el año anterior.
Una vez más parece que la situación política va a tener también un efecto en la campaña navideña. El conflicto catalán va a beneficiar según estiman los productores de los espumosos.
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