Por Jordi Font Comas d’Argemir (Efe)
Los partidos catalanes inician tras las municipales una nueva carrera electoral con la vista puesta en el 27S, cuatro meses en los que un bloque soberanista con ‘sobrecarga’ en las piernas tratará de arrastrar a los catalanes hacia una suerte de plebiscito independentista tras dos años de proceso soberanista.
En el terreno de juego hasta las catalanas será clave la relación entre el presidente de la Generalitat y de CiU, Artur Mas, y el máximo dirigente republicano, Oriol Junqueras; la hoja de ruta que Unió adopte sobre el soberanismo; el análisis que CDC haga del 24M tras perder Barcelona; el calendario electoral de Mariano Rajoy; el auge de Ciudadanos; y, entre otros factores, los casos judiciales de presunta corrupción.
CiU ha evitado este lunes hacer un debate sobre las elecciones catalanas anticipadas y se ha centrado de momento en valorar únicamente las resultados de los comicios del domingo, de los que ha subrayado la victoria de la federación en el conjunto de Cataluña.
CDC y UDC han celebrado simultáneamente sus respectivas ejecutivas y han comparecido en conferencia de prensa el secretario general de CiU, Ramon Espadaler (UDC), y el secretario general adjunto de la federación, Lluís Corominas (CDC), antes de que se celebre esta tarde otra reunión, en este caso del Comité Ejecutivo Nacional de la Federación (CENF).
Preguntado por los efectos de los resultados del 24M sobre las elecciones anticipadas del 27 de septiembre, Espadaler ha dicho: «No hemos hecho ningún debate al respecto».
LA CONSULTA DE UDC EL 14 DE JUNIO Y EL FUTURO DE CIU
El próximo 2 de junio, el comité de gobierno de Unió liderado por Josep Antoni Duran Lleida y Ramon Espadaler acordará una hoja de ruta en la que podría incluirse o no la independencia como objetivo político, una propuesta que deberán votar los militantes del partido en una consulta interna el 14 de junio.
Sus socios de federación, CDC, estarán pendientes de la propuesta que aprueben los democristianos para ver si encaja con el proyecto independentista de Mas. De ser así, salvarían a la federación de un divorcio que, desde hace años, siempre parece estar al caer pero que nunca se consuma. Está llamada a ser la gran prueba de fuego de un longevo matrimonio de más de 30 años entre CDC y UDC.
HOJA DE RUTA DEL BLOQUE SOBERANISTA.
Los recelos de Unió y el rechazo frontal de ERC y la CUP hizo naufragar a principios de año el proyecto del president Artur Mas de articular una lista unitaria del soberanismo en una elecciones anticipadas para que tuvieran una clave inequívoca de plebiscito sobre la independencia. La propuesta quedó aparcada pero podría volver a entrar en el debate conforme se acerque el 27S.
CDC debate este lunes el resultado de las municipales y hay dirigentes que podrían incluso cuestionar si es mejor retrasar las catalanas y plantear antes una candidatura única soberanista en unas elecciones generales, para luego afrontar con más fuerza las catalanas.
Por el momento, lo más probable es que Mas opte por encabezar una lista de CiU o se despoje de las siglas para conformar una lista transversal con miembros de su partido e independientes.
Está por ver qué papel jugará el nuevo presidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sánchez, y si su antecesora, Carme Forcadell, calmará sus ansias de activismo político inscribiéndose en la lista de Junqueras o de Mas.
CDC, ERC, MES -soberanistas escindidos del PSC-, la Asociación de Municipios por la Independencia, Òmnium Cultural y la ANC ya cerraron antes de las municipales un principio de acuerdo, al que esperan que se sumen la CUP y UDC, sobre una hoja de ruta en común a seguir tras el 27S hasta llegar a una eventual independencia.
LAS ESTRUCTURAS DE ESTADO, EL 15 DE JULIO
Antes del parón vacacional, el Govern se ha comprometido en presentar antes del 15 de julio los planes para poder ejecutar las denominadas «estructuras de Estado» en el caso de que se inicie un proceso de independencia de Cataluña y una «desconexión legal» con el Estado.
Estos planes, articulados a partir de los informes del Consejo Asesor para la Transición Nacional, incluyen una hacienda propia, una seguridad social catalana y las estructuras energéticas básicas.
LOS PARTIDOS ESCOGEN CANDIDATOS
El próximo 26 de julio, el PSC que lidera Miquel Iceta tiene previsto celebrar primarias abiertas para escoger a su candidato para la Generalitat, el mismo día en que se decidirá el aspirante a la Moncloa por parte del PSOE y el candidato socialista por Barcelona en las generales.
En Ciudadanos, el presidente Albert Rivera deberá decidir también si aspira a ser el cabeza de lista en las catalanas, en las generales o en ambos comicios.
El resto de partidos también tendrán que designar a sus candidatos a la Generalitat, aunque no se esperan sorpresas al menos entre los soberanistas: el candidato de CDC o de CiU será Artur Mas y Oriol Junqueras revalidará la presidencia de ERC en julio.
Podemos-Podem debe celebrar también primarias en las próximas dos semanas, una formación en auge tras la victoria de Ada Colau en Barcelona en una plataforma política que les incluye junto a ICV, que desearía repetir la experiencia el 27S.
LA CONVOCATORIA DE LAS CATALANAS, EL 3 DE AGOSTO
Antes de iniciar unas cortas vacaciones, Mas tiene previsto firmar el 3 de agosto el decreto de convocatoria de las catalanas y finiquitar un segundo mandato de casi tres años, uno más que el anterior.
Mariano Rajoy aún no ha anunciado cuándo convocará las generales, previstas para finales de año, pero si las anticipara y coincidieran con las catalanas podría afectar a los planes de Mas.
LA CAMPAÑA ARRANCA CON LA DIADA
La campaña electoral arrancará por primera vez el 11 de septiembre, la Diada de Cataluña, en la que está prevista una manifestación organizada por las entidades soberanistas a lo largo de toda la Avenida Meridiana de Barcelona a favor de la independencia.
La coincidencia de esta jornada marcadamente reivindicativa con la campaña electoral ha llevado a Ciudadanos a pedir cambios en la concentración en aras de la neutralidad.
LAS CATALANAS, EL 27 DE SEPTIEMBRE
Si Mas no se desdice, el proceso culminará dentro de cuatro meses con unas elecciones el 27 de septiembre que los soberanistas querrán convertir en una suerte de plebiscito independentista, unos comicios que serán decisivos para el proceso soberanista y la carrera de Artur Mas.