Por Cambio16
09/03/2017
El sistema institucional de la Generalitat de Cataluña, las administraciones locales y el sector energético han constituido la Mesa de impulso al autoconsumo fotovoltaico en Cataluña, un instrumento que tiene como objetivo incentivar este tipo de instalaciones, tratando de disminuir las dificultades que crea la legislación del Gobierno central.
“La voluntad es establecer los mecanismos necesarios para incentivar a los ciudadanos a aplicar sistemas de almacenamiento de energía asociados a sus instalaciones fotovoltaicas, entre los que se incluirán ayudas a fondo perdido a la compra de baterías de ion litio por parte de la Instituto Catalán de Energía”, explica la Generalitat.
Las ayudas para la compra de baterías asociadas a las instalaciones fotovoltaicas parten con un presupuesto de 360.000 euros para este 2017. Un presupuesto que se espera seguir aumentando en los próximos años.
La Mesa, coordinada por el Instituto Catalán de Energía (ICAEN) cuenta con la participación de más de más de 70 agentes entre administraciones autonómicas y locales, entidades y empresas. El objetivo es facilitar los máximo posible que los consumidores puedan apostar por este tipo de instalaciones.
«Se busca facilitar la actuación conjunta y la coordinación de los diferentes actores implicados en el autoconsumo (administraciones públicas, empresas y asociaciones profesionales del sector fotovoltaico, distribuidores y comecializadores de electricidad, colegios profesionales, asociaciones de consumidores, fabricantes y distribuidores de baterías, etcétera), con la finalidad de alcanzar una mejor y más rápida penetración de la energía solar fotovoltaica en Cataluña -mayoritariamente en techos solares de edificios o pérgolas fotovoltaicas- para avanzar hacia un sistema de generación eléctrica más limpio, más distribuido y con una mayor participación ciudadana, pese a las barreras técnicas, económicas y administrativas que impone la normativa de ámbito estatal actual» expone el documento de la Mesa de impulso al autoconsumo, elaborado en febrero pasado.
En los últimos meses Cataluña ha demostrado que apuesta por la transición hacia un nuevo modelo energético. Primero llegó la presentación de una proposición de ley de medidas de fomento de la electrificación del transporte por carretera, para fomentar la movilidad con energía eléctrica, una iniciativa que nació a través de la Generalitat de Catalunya y contaba con una gran respaldo público-privado, con más de 50 entes y empresas participando en su desarrollo.