Dentro del compromiso que Leroy Merlin tiene con la sociedad para lograr un hábitat mejor, nunca pierde de vista el consumo responsable y su papel en este ámbito. Es aquí donde se ubican las nuevas lámparas de techo y pantallas para lámparas de sobremesa de SoulEM, cada una de las cuales cuenta una historia especial: la de una mujer en situación de exclusión social que tiene una oportunidad gracias al trabajo artesanal que realiza dando forma a piezas decorativas únicas.
Apostar por empresas sostenibles forma parte del propósito de Leroy Merlin, cuya estrategia de negocio impulsa los beneficios sociales no como simple filantropía, sino como una manera de incorporar sus productos a las colecciones de la firma. Y siempre en condiciones justas de trabajo y con beneficios para las personas y el medio ambiente, al amparo de una economía social más justa y colaborativa.
El objetivo de responsabilidad social corporativa de la compañía busca hacer posible un hábitat mejor para todos impulsando iniciativas que promueven la integración personal y profesional de personas en situación o riesgo de exclusión social. Este tipo de colaboración incide directamente en el desarrollo local, generando riqueza en la comunidad y apoyando la actividad económica y el emprendimiento; genera oportunidades de empleo al tiempo que apoya el acceso al mercado de trabajo, ofreciendo oportunidades de formación e integración laboral de calidad bajo criterios de diversidad e igualdad de oportunidades, y protege el medio ambiente, mediante productos sostenibles, fabricados según buenas prácticas medioambientales, integrando el uso de elementos orgánicos y reciclados en un trabajo 100% artesanal.
Los cinco pilares para cuidar el planeta desde casa son protección de biodiversidad y ecosistemas; economía circular; cadena de suministro responsable y comprometida; mejorar el hábitat del futuro y la sostenibilidad en el hogar a través de la gama Ecopciones
SoulEM es una empresa social madrileña alineada con criterios de desarrollo sostenible. Su propósito es integrar socialmente a mujeres en situación de exclusión a través de la venta de productos que ellas mismas elaboran. En colaboración con Leroy Merlin, la empresa renueva esta temporada su colección de pantallas artesanales.
La nueva gama estará formada por seis modelos FRIDA, todos ellos fabricados en yute orgánico y realizados de manera 100% artesanal. Lámparas con diseños de tendencia y un estilo neutro y fresco que se adapta a la perfección a todas las tendencias decorativas. El embalaje que protege el producto es reciclado y reciclable. Así, Leroy Merlin colabora con SoulEM en garantizar la estabilidad laboral de las trabajadoras y promueve una compra responsable y sostenible.
La alianza entre Leroy Merlin y SoulEM repercute en varios Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) como son la reducción de la pobreza (ODS-1), la igualdad de género (ODS-5), trabajo decente y crecimiento económico (ODS-8) y producción y consumo responsables (ODS-12).
UN MODELO EMPRESARIAL JUSTO Y SOLIDARIO
La colaboración entre Leroy Merlin y SoulEM comenzó en 2018. Macarena López-Cordón, socia fundadora de SoulEM y una de las almas del proyecto, contactó con el departamento de Responsabilidad Social de Leroy Merlin para darse a conocer. Desde el primer momento, la afinidad entre ambas empresas quedó clara y la colaboración empezó a desarrollarse.
Tras lanzar la primera gama de pantallas, desde el área de negocio responsable de la compañía comentan: “Nos hace especial ilusión este proyecto porque aúna compromiso social, diseño y un precio competitivo”.
Cada uno de los modelos de pantallas y lámpara se realiza mediante un proceso artesanal y cuidado, llevado a cabo por las mujeres que integran SoulEM. La gama original consistía en tres diseños distintos muy decorativos: una lámpara de techo con pantalla de estampado botánico y dos pantallas lisas en yute para lámpara de sobremesa de 25 y 35 cm de diámetro.
Todas llevaban el nombre de mujeres relevantes –Frida, Hipatia y Chimamanda–. Con ellas, así como con otros productos disponibles en tiendas físicas y online, Leroy Merlin apuesta por una producción responsable y comprometida.
Esta estrategia de negocio se ajusta al modelo de empresa social justa y solidaria. Según Macarena López-Cordón, «en SoulEM contamos con un taller de fabricación de pantallas artesanales, decoración de interiores y un taller de costura donde confeccionamos moda ecológica y sostenible.
Leroy Merlin apuesta por la economía circular y fomenta el consumo responsable para proteger los recursos naturales y ahorrar energía. Los centros de Galicia transforman los residuos de madera en nuevos productos, desde aglomerados para la construcción hasta muebles de cocina, evitando así usar nuevos recursos.
Las mujeres que llegan a estos talleres aprenden a confiar en sí mismas y a desarrollar un oficio creativo, artesanal y hermoso. Forman parte de nuestra empresa durante tres años para después integrarse con nuestra ayuda en las plantillas de otros negocios o continuar como parte de nuestro propio proyecto. Y gracias a empresas como Leroy Merlin nos es posible garantizar su estabilidad y proporcionarles un salario justo».
Ahora, la colección se renueva por completo para cubrir las necesidades y los gustos de las nuevas tendencias decorativas. Las seis pantallas Frida se presentan en yute natural, beige y verde, siendo perfectas para la decoración más estilosa, natural y solidaria. Y más adelante se prevé añadir tres modelos más.
PRODUCTOS CON CONCIENCIA
Leroy Merlin lleva tiempo apostando por proveedores con responsabilidad y compromiso social y, por ello, ha desarrollado diferentes iniciativas como el proyecto Ecomallas, que promueve la inserción sociolaboral de personas con discapacidad intelectual a través de la producción y comercialización de revestimiento porcelánico.
Además, Leroy Merlin y la Fundación Comercio para el Desarrollo desarrollan conjuntamente la primera alianza público-privada para el desarrollo de productos de comercio justo para el acondicionamiento de jardín. Los productos fruto de este proyecto cuentan con los sellos Madera Justa y FSC y se comercializan en todas las tiendas de Leroy Merlin de España, impulsando el comercio justo y la autogestión sostenible de los productores de Guatemala.