Por Cambio16
12/02/2018
El Carnaval de Rio de Janeiro 2018 en Brasil plantó su majestuosidad frente a la crisis. La más internacional de las tradiciones brasileras sorteó los debates de falta de presupuesto y la inestabilidad política para dejar claro por qué es el mayor espectáculo carnestolendo del mundo. Por consiguiente las mayores escuelas de Samba de Rio de Janeiro encandilaron al Sambódromo una vez más. Y sus desfiles este año, además de su tradicional luminosidad, no dejaron de lado la crítica social.
El domingo desfilaron siete de las trece «escolas» de la categoría especial del Carnaval de Rio de Janeiro 2018. Cada procesión alineó unas 3.000 personas, que recorrieron la pista de 700 metros. A los lados flanqueadas por tribunas con unos 70.000 espectadores que ovacionan el paso de enormes carrozas alegóricas, coronadas por mujeres cubiertas principalmente por plumas y lentejuelas.
Las comparsas giraron entre los tradicionales ‘enredos’ -temas relacionados con temas históricos- hasta las francas alusiones políticas al alcalde evangélico de la ciudad Marcelo Crivella, que recortó las subvenciones a los desfiles. «Con dinero o sin dinero, igual me divierto» fue uno de los lemas más escuchados. Asimismo proclamaba provocativamente: «Pecado es no divertirse en el carnaval», en mensaje al alcalde de la ciudad.
Varias alas de este desfile estuvieron consagradas a recordar esos resabios, como el alto nivel de desigualdad social, la explotación en los trabajos rurales y en talleres industriales, el trabajo informal. Denunciaron también la reciente reforma de la legislación laboral, que flexibilizó las normas de contratación y de despidos.
El Carnaval de Rio de Janeiro 2018 también convive fuera del Sambódromo. Millones de entusiastas carnavaleros desfilan desde hace varios días en «blocos» callejeros. Son unas procesiones que arrastran multitudes a cualquier hora del día y de la noche.
Las festividades reúnen también a millones de personas en otras ciudades de Brasil como Salvador de Bahia y Recife. En estas localidades la fiesta se tiñe con el folclore regional al ritmo de «blocos» de samba-reggae, frevo y maracatú.
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