Por Cambio16
23/11/2015
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El primer ministro británico, David Cameron, ha anunciado tras reunirse con el presidente francés, François Hollande, que su país pone a disposición de Francia una base militar británica en Chipre para reforzar la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Tras el encuentro, celebrado en el Palacio del Elíseo, Cameron indicó que el Reino Unido «hará lo posible» para ayudar a Francia, convencido de que la amenaza es «común» y de que su país debe intervenir militarmente en Siria, y avanzó que esta semana presentará al Parlamento británico su plan de acción.
El presidente de Francia ha asegurado este lunes que su país va a intensificar su bombardeos contra el Estado Islámico (EI) en Siria y a escoger los objetivos «que hagan el mayor daño posible» a esa organización terrorista. Además dijo estar «convencido» de la necesidad de acelerar la incursión aérea en el país.
Hollande, que abrió con Cameron su maratón diplomático que le llevará a reunirse esta semana con los líderes de Estados Unidos, Rusia, Alemania, la Unión Europea y la ONU, aseguró que la prioridad es «destruir al EI», para lo cual «es necesario que los bombardeos sean lo más eficaces posible».
«Corresponde al Reino Unido dilucidar cómo se implican» en la lucha contra ese grupo terrorista «que nos hace la guerra», indicó el presidente francés, que junto con el primer ministro británico depositó un ramo de flores en el Bataclan, escenario de la principal masacre del 13-N.
Hollande aseguró que el portaaviones francés Charles de Gaulle, operativo a partir de hoy en el Mediterráneo oriental, «tiene el mandato claro de golpear fuerte al EI».
Además, aseguró que los bombardeos cuentan con el respaldo del Consejo de Seguridad de la ONU, que aprobó la pasada semana una resolución al respecto en la cual también se preconizaba una solución política a la situación de Siria.
En ese sentido, Hollande afirmó que «es preciso constituir un Gobierno de unión» en el que el actual presidente sirio, Bachar Al Asad, «no puede ser el futuro» porque «ha contribuido a masacrar a su población».
En el apartado bilateral, Hollande recordó que Francia y el Reino Unido tienen un acuerdo de defensa propio, el Tratado de Lancaster, que les impone «obligaciones comunes en materia de defensa» más allá del compromiso dentro de la Unión Europea.
«El objetivo es reforzar, si fuera necesario, los sistemas de información contra el terrorismo», indicó el presidente, que aseguró que París y Londres mejorarán «más aun» los intercambios de información para poder ser más eficaces».